A la poesía

No quiero ser zalamero ni dicotómico; pero esta poesía lleva música y belleza serena y seria. Un placer, don Vicente. Se le saluda.

 

Ay Don Vincente, yo me hago las mismas preguntas. ¿Qué sería de la vida sin los versos? La poesía es un ejercicio tan noble para abrir el universo de sentires que nos habitan. A veces no importa que nos lean, basta solo redimir el alma al expresarnos.

Un abrazo para usted y chu.

 

Te ha faltado decir Vicente, algo que en ocasiones he reflexionado sobre este "vicio" de escribir : la poesía es como una adicción, un veneno en vena que necesitamos echar fuera, y hay días que, cuando no nos sopla la musa, parecemos almas en pena.

Magnífico soneto, amigo. Mis estrellas.

 

y cuando esa sinfonía desaparece llevada por los vientos de lo cotidiano, cuando ese despertar deja vacía el alma del ensueño de su abrazo, cuando desnuda de oropeles te enfrentas al espejo de la vulgaridad de tu imagen, cuando te sientes humo de las cenizas de tu voz enmudecida; clamas a los cielos, buscas en tus recuerdos y te aferras al susurro del silencio que aún palpita.

Se me fue la pinza! jejejeje
Besos y estrellas todas Gran Vic
Eva

 

Excelente soneto a la poesía, estimado Vicente,
para pensar;
un saludo cordial,
Eduardo

 

Sobre eso de las dicotomías habría mucho que hablar, y además tendría unas rimas sonoras y musicales. Por ejemplo con fantasías, con alegrías y con poesías...
Buen soneto, bueno, sí señor.
Un abrazo.