La vida es una copa de cielo

qué pequeño es el mar
para mi llanto

canto de aros
muerte que llena
la vida de vacío

pájaro de ramas
de silencio
árbol de campanas
de sombras
que ruedan
por el abismo
de mis pies

soy un río de relámpagos
una mano de adioses

cuando por fin me mires
verás que ya no existo
y sólo el amor queda

sólo te he mostrado
el camino
que no debes tomar

que no debes tomar

que no debes...
​

 

Ups,, la noche se vistió de nostalgia y tu pluma pintaron pintaron de gris el cielo, ese que con su manto siempre los unirá a pesar de todo... Un placer visitarte y dejarte mis huellas. Un abrazo

 

Dicen que las penas acompañado duelen menos...le dejo un abrazo.
con mi melancolía, casi del mismo color.

Gracias por mostrarme el camino.

 

Gran trabajo querido amigo, dejas una mirada desde ese fondo de trsiteza, como un espejo escuro, la primer huella habitada la esperanzadora, la que nubla el regreso del abismo. esa huella que busca habitarse. Excelente y conmovedor poema. Abrazo de luz.

 

Quien pasa a tu lado te mira siempre, quien mira tu alma se prende de ti... l
Querido niño azul, deja que el mar se lleve las tristezas!! un abrazo enorme y cariñoso!

 

Gracias Lunita, ahora me sabes dulce. Besos.

 

Ya ves que sí nos acompañamos. Gracias Azulita, cuántas veces te he dicho que te quiero..?... Ya sé, en eso no tengo control... Perdóname honey...

 

"cuando por fin me mires
verás que ya no existo
y sólo el amor queda"


Chidisimo!!!

 

​Gracias, estimado poeta. Todo recurre en el transcurso. Abrazos.

 

precioso, me encanto, saludos.

 

Lo editaste hoy... Es muy triste el poema... El final suena casi trágico... Pero es bello, como siempre...

 

Todo un honor llegar a tan bellos versos. Gracias por compartir.
Saludos fraternos.

 

Te agradezco Esperanza, que signifique también eso, además de tu magnífica poesía. Voy a comenzar a decir te quieros jejeje... Pero es cierto. No digas nada, amiga y aguántame...