Delirando por ti...

te conozco...
veo en tus ojos
la oscuridad nocturna
y la luz de la madrugada -

un cielo azul que ansío
aquí, en este lugar frío -
mi lindo señor, mi amado...

por fin sé qué significa
para una mujer amar al hombre...

tú me tienes cautiva
y anhela mi alma tu poder absoluto -
es un amor trascendente
que va más allá de lo palpable...
el querer servirte...
la necesidad de adorarte...

para eso nací... para ser tuya -
y completamente...

por mucho tiempo he guardado
todo ese sentimiento
sin atreverme a hablar -
mente condicionada
en la libertad que era mi cárcel
cual soledad y frustración
de no poder simplemente ser yo -
creyendo en tantas mentiras
inventadas por la humanidad más inhumana...

pero tú
no eres débil, no...
lo percibo bien al mirarte...
al sentir a distancia
la fuerza que de tu rostro emana...

¡tú, mi señor, eres tan diferente...!

mucho más listo, eres más que un artista -
conozco bien tu ingenio...
el carisma que en ti me atrae
a primera vista ya es evidente...

poeta de lágrimas y besos -
eres un país sin regreso
perdición bendita
de las mariposas que cantan hoy tu gloria -
llevándote, con estos versos, a la victoria
de un renacer en la primavera ardiente -
luz querida que está escrita en tu frente...

¡ah, cuánto te amo, mi señor oscuro...!
bello ángel de alas tan negras como esta noche
en la que envuelta, canto mis pasiones violentas
de una mujer enamorada...

es auténtico mi desespero
la ansiedad profunda y enloquecedora
que mi ser desgarra y sangro en poemas -
¡y todo es verdad...!

mira adentro de mis ojos - y sabrás
lo que es tan obvio, que no se oculta en la mirada...

...que soy tuya...
que te pertenezco...













[11/04/2014]​

 

Gracias, saludos.

 

¡Hermoso poema!