El saber de gobernar

¿Qué le engrandece al político?
La virtud de gobernar
y servir al ciudadano.
Siendo honrado y tal vez crítico.

La virtud de gobernar y servir al ciudadano
hace al pueblo soberano si se sabe utilizar.
El poder del buen mandar quien lo tuviera en su mano
debe saber de antemano que es un bien que ha de guardar.

¿Qué es lo que ocultan vilmente
corruptos y embaucadores?
Los deseos inmorales
que mancillan sus honores.

¿Y quién llegará al poder
con mentirosas promesas?
Todo aquel que es impostor
y de ambiciones burguesas.

¿Quiénes con tantas patrañas,
mienten a los ciudadanos?
Los que fingen con descaro
mientras se manchan las manos.

¿Y quiénes serán tachados
como viles desalmados?
Aquellos que por delitos
terminarán deshonrados.

Corruptos y embaucadores que mancillan sus honores
con mentirosas promesas y de ambiciones burguesas,
mienten a los ciudadanos mientras se manchan las manos.
Como viles desalmados terminarán deshonrados.

El poder del buen mandar
quien lo tuviera en su mano
debe saber de antemano
que es un bien que ha de guardar.​

Antonio Nieto Bruna
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Celebro que te gustaran estos versos, estimado Agus, eres muy gentil en tus consideraciones.
Gracias por tu visita y tu comentario.
Un cordial saludo.

 

Así es estimado Mantícora, también es verdad que en nuestras mano está el poder desterrar a todos ellos, lo que ocurre es que el hombre por naturaleza es ambicioso y esa ambición mal entendida nos lleva a sacar de nosotros todo lo peor.
Gracias amigo por tu visita.
Un abrazo.

 

Disculpa, estimada Ropittella por mi falta de respuesta a tu comentario.
Se me debió quedar en el limbo en una de mis largas ausencias del Portal.
Un fuerte abrazo.

 

Totalmente de acuerdo con tu apreciación.
Disculpa la tardía respuesta a tu comentario.
Un cordial saludo.

 

Después de tanto tiempo he tenido que volver a releerlo para poder contestar a tu pregunta, estimado Kalkban. Es un poema compuesto entre el libre albedrío de mi imaginación y las estructuras clásicas, mezclando octosílabos con versos hexadecasílabos sin una rima ortodoxamente usada y con la particularidad de que la penúltima estrofa está compuesta con los versos segundo y cuarto de las cuatro estrofas anteriores.
Una de las tantas licencias irreverentes que me permito de vez en cuando.
Gracias por tu visita y comentario y disculpa la tardía respuesta.
Saludos cordiales.

 

Muchas gracias estimada Esther por tu visita y comentario.
Disculpa mi tardía respuesta.
Un abrazo.