Bebiendo tristeza

Se disuelven en botellas, todos estos sentimientos
los recuerdos de una era donde no importaba el tiempo,
cuando habían corazones que adoraban mi presencia,
cuando habían mil razones para amar esa creencia.
Se oscurece como el cielo, este cuarto desolado
y como un grito ahogado me seduce la violencia.
Si no tengo simpatías, ni tampoco quien me abrase
¿de que sirven las palabras si nadie escucha mis frases?
Los pedazos que me arranco, cada locura que hago
los olvido en cada trago que bebo con tanto esfuerzo.
Los momentos son fugaces deseando recordar
cuando no quería saltar desde algún piso noveno...
si la vida fuera justa, ya habría ganado esto
sin vivir de ilusiones, sin quedarme sin aliento.
Solamente un sorbo mas, es tan solo otra caricia
de mi alma que masturba al amor con su desdicha.
Se me acaban las ideas, ya me quedan pocos vasos
voy rompiendo a cada paso los pedazos de mi ser.
Mientras sigan los creyentes cantando de libertad
yo recito mis poemas para volver a soñar.

 

Melancolía en cada sorbo con la tristeza de compañera. Un placer leerte. Saludos.

 

Muchas gracias por tu comentario, si, la tristeza en cada sorbo, en cada gota...
Saludos!

 

Saber...
Al leerte noto graves denuncias y demandas, esbozadas desde la nostalgia que provoca nuestro presente o los efectos del pasado, pero sin lugar a dudas llevas sueños a cuestas y eso en definitiva abriga esperanza. En este verso me quedó la duda (*) donde escribes "abrase" si te refieres a que alguien te de calor con brasas es correcto, pero si quisiste enunciar un ausente abrazo sería "abrace". Esto claro está no merma en nada tu inspirado acento Encantado con esta lectura. Un fuerte abrazo.