Rutina

Sin mucha esperanza empieza
estrepitosa mañana.
Hacemos callados fila
con el reloj en la espalda.
La rueda gira ¡sí gira!
Y cada parte se ensambla.
Aprieta, corta, tritura
pero egoísta no mata.
Todos con el yugo puesto
arrastrando sin más ganas
algún que otro sueño falso
antes que no tener nada.
El ciclo sigue perfecto.
Cualquier pieza se reemplaza.
Sobrevive el que atesora
¡ser libre y volver a casa!

 

Se dice mucho en dieciséis versos con una cadencia excelente.
Con mi saludo cordial.

 

Gracias por tomarte tu tiempo para leerme y por tus palabras! Un saludo y un abrazo!

 

Todo un placer y recuerdos a aquella maravillosa tierra.

 

Espléndido, recordé por alguna razón a Sísifo, el "ser libre y volver a casa" un final esperanzador. Saludos

 

Muchas gracias Adeline; precisamente eso quise transmitir. Gracias por leerme y por tu comentario! Un abrazo!

 

Fue un gusto, seguiré leyendo tus escritos, un abrazo igual