Lo que La Antigua calla

Sólo tú sabes mi verdadero nombre,
ese tan antiguo que el mundo se ha vuelto incapaz de pronunciar.
Y cuando aletea sobre tu lengua
lo hace también a través de todos los caminos de mi cuerpo,
a través de esas nuevas sendas que abriste y que se convirtieron en cicatrices.
Veo en tus ojos la reverberación de mis propias perversiones,
esa sombra violácea con mil lenguas y ochocientos dedos.
Y si de mi boca, ya inundada de tu aliento y tus venenos,
pudiese surgir algo ahora mismo
serían las plegarias obscenas que tatué sobre tu carne antes de tu nacimiento.

 

Waow...es un poema
muy original.
Sensual,erotico,apasionado
mostrando el lado profundo y oscuro del deseo carnal.
Las imágenes siempre geniales
con tu sello muy personal...

 

Es interesante , casi oscuro, aunque reconozco que no alcanzo a comprender. Un saludo hasta tu orilla

 

Siempre me encantan tus comentarios, Arkeidos

 

bellas palabras que te nacen del alma, me has dejado sorprendido con cada verso.

 

Bello poema, un estilo muy personal destaca en tus letras, me gusta lo que cuentas y como lo cuentas. Un abrazo. Paco.

 

Excelencia en los admirables versos preciosos, brillante inspiración emocionante.

 

Vibrante, sensual y muy contundente...
Muy grato leerte...te abrazo con todo mi cariño...