Sonrisas y Lágrimas

Al ritmo de una dulce melodía
sus dotes van saliendo cuando canta,
la magia que atesora su garganta
son notas que rebosan alegría.

Sacando con su voz dulce armonía
el miedo y sus temores solivianta,
y plena de ilusión, la gobernanta,
enseña sus canciones cada día.

A siete adolescentes ella anima,
no falta diversión ni desparpajo
a cargo de su voz y de su rima.

De pronto finaliza su trabajo,
el ruido de la guerra se aproxima
y toda la ilusión se viene abajo.​

 

Excelente este soneto, estimado Ramón,
una muestra de contrastes, cuando todo parece pacífico y tranquilo,
aparece el monstruo inesperado de la guerra,
no sería la primera vez ni la última, que la humanidad se enfrenta;
excelente trabajo poético,
un saludo cordial,
Eduardo

 

Un magnífico resumen has hecho, Ramón, en los catorce versos que tiene el soneto, de esa película que es magnífico musical, por cierto, y cuyo título te ha servido para encabezar tu trabajo.

Me ha gustado mucho, amigo.

Un abrazo.

 

Siempre te destacas amigo en el arte de la poesía, ha sido un placer la lectura de tu poema

Un abrazo

 

Qué agradable sorpresa querido Ramón, la de veces que habré visto la peli.
Te quedó un soneto redondo
Abrazos desde Madrid

 

Gracias Eduardo por acercarte a mi poema amigo mío, un fuerte abrazo.

 

Gracias juan, un fuerte abrazo desde Tarragona

 

Gracias Mariluz, un fuerte abrazo corazón, gracias por acercarte amis letras.

 

Gracias Luis Adolfo, la verdad es que es una película entrañable, de las que quedan para el recuerdo, un fuerte abrazo amigo mío.

 

Buen poema, Ramón, que expresa lo cruel que es la guerra al robarse la armonía y el pacifismo de las personas. Me gusta la manera como has sabido extraer la esencia de esta película que nos deja en la conciencia esa dicotomía bien marcada entre el bien y el mal.

Un cordial saludo y mis respetos.

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Gracias , muchas gracias por tus palabras, un fuerte abrazo desde Catalunya