Un cielo y unas alas de cera

Tenemos la lluvia
y un instante sin llave
que siempre vuelve con la noche,
bebemos palabras nacidas
de los ecos que el viento
siempre guarda,
besamos las huellas
de los pasos que miran
hacia las estrellas,
escribimos silencios rebeldes
cuando nuestros labios cansados
duermen en los huesos
de unos sueños que respiran
horizontes y primaveras,
todo es de papel,
nada brilla más de un día,
los ojos solo quieren ver
lo que nos alimenta de veras,
reímos por puro instinto
de supervivencia,
nos salvan los besos
que nunca lloran
y amar muriendo en cada hora,
dentro de nosotros
habitan un cielo
y unas alas de cera.

 

Creo que también tengo alas de cera, aunque espero que no se me rompan, para que me rindan este vuelo. Un gusto pasar por acá y leerte Paco.

 

Gracias amigo Robsalz por tu bello comentario. Un abrazo. Paco.

 

Bellísimo poema, Paquito. Yo espero que las mías sigan volando por buenos horizontes hasta un día poder tocar ese cielo. Me encantó. Un abracito tierno, amigo mío.

 

Nos queda siempre mirar hacia delante, peeero con la mochila cargada en la espalda...
Mientras nos quede un hálito de vida, seguiremos amasando sueños en nuestro interior, sueños que latidos del corazón son.
Un gusto acompañarte Paco para disfrute de mis niñas.
Alegre paz compañero.
Vidal

 

Gracias amiga Rosa por tan bello comentario. Un abrazo. Paco.

 

Gracias por tu visita y por tu alegre paz amigo Vital. Un abrazo. Paco.

 

Gustoso dejo mi huella sobra este magistral poema.
Fuerte abrazo amigo Paco, con afecto.

 

Siempre alegras mis cansados ojos con tus bellos comentarios amigo Ramiro. Te doy las gracias por ello. Abrazote vuela. Paco.