¡Cantemos al amor, Poetas¡

¡¡¡ Cantemos al amor, Poetas ¡¡¡

Cantemos al amor

¡¡¡ Hagamos unos versos de filigrana ¡¡¡

¡¡¡ Ebrios de letras ¡¡¡

A ese que no existe, pero que es muy bello sueño
y a los besos dopaminérgicos

y al calor imaginario de su efecto placebo

y a su verdad con filo de navaja

y al ataúd y al velorio que deja en el tórax.

…fuck the love.

 

Que triste.
Abrabesos

 

Al final se puede concluir que saber, saber, sabemos poco, o que en realidad lo único que sabemos es que no sabemos nada, pero sí que sabemos también, como bien dices tú en tu poema, que realidad o sueño el amor es una forma de felicidad. Quizá la forma de felicidad más extendida, universal. La droga más potente.

Me gusta la controversia, el planteamiento que enuncias con tu poema. Es preciso reflexionar. No hay que limitarse a mirar; es preciso ver. No sólo hay que oír. Es imprescindible escuchar.

Un cordial saludo, Ricardo.

 

Lo que ocurre es que se habla (y se escribe) del amor muy fácilmente... y seguramente no es tan sencillo (...o lo es más de como se piensa). Afilados versos que me gustaron, Bro. Mis felicitaciones, amigo. Un abrazo.

 

Sí amigo Homo, cantemos al amor porque si no le cantamos a él es que lloramos y cantando se van las penas aunque en el alma éstas también dejan su huella. Tus versos son dulces y melodiosos, con su toque romántico y sentido. Encantada de leerte querido amigo. Besazos con admiración y con cariño.....muááááácksss....

 

...ya ves lo que dicen: Nada es verdad, ni es mentira...todo se ve según el color del cristal con que se mira. Gracias por pasar.

 

Eres la releche, jajajaja. Hasta de un motivo serio, incluso melancólico, y hasta nostálgico, eres capaz de sacar aderezo para hacerlo apetecible al lector, jajaja. Lo que yo digo, eres un poetazo como la copa de un pino, con profundidad en sus creaciones, con sentimiento, y con ingenio. Puedes aunar denuncia, humor, socarronería, jocosidad, a veces, hasta ironía, seriedad, emotividad, sensibilidad, en un solo poema.
Mi admiración junto a un fuerte abrazo, mi buen Homo-Adictus..., y como no, yo, me uno a ese canto al amor... ¡faltaría más!, jajaja, siendo como soy un irredento Homo-Erectus, JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA.