El no final

Continúa la línea: entra pero no sale

aún si es rebuscado resbalarse

pide y pide una implosión en su nombre

es divertido porque es difícil abstenerse.

De cualquier niño, mujer, ogro u hombre

pide un momento, lo que merece.


Perder el objetivo es tentador hasta que pierdo el objetivo

entonces las interpretaciones son recortes

y la verdad es cualquier oración que no tenga inicio

puedo rescatar la utilidad por los bordes

entonces rocío gasolina al sosiego y sale despedido

la súplica es tenue, la esencia maestra, endeble

y el mundo, las mariposas y no muertos son algo entretenido.


Una camisa de rayas sobre una camisa de fuerza

el coche explota al girar la llave

la nave espacial que navega sin destreza

salgo a la calle, no voy a la cárcel, tampoco al cine

es el destino cual adivinanza

dame unas patatas y nos vemos en septiembre.


El aterrizaje tan abrupto que licuó al piloto

es la famosa estela del no final

el puño de furia y su inevitable impacto

los zumbidos multipresentes del panal.


Dicen que continúe pero que me detenga

que no es una contradicción

yo digo que es una senil vieja

y su pesado bastón.

 

El no final y no principio. No se porque me recordaste un tema mío que se llama la llegada del silencio. Un saludo cordial.

 

Yo tampoco lo sé. Pasaré a verlo porque llamaste mi atención. Un saludo.