Amor terrenal.

Te crearon...
Desde el centro.
Muy adentro.
Acertaron.


Buena puntería.


Lotería.
La quiniela.
Amigos, uno entre mil.
Con nombre y apellidos. ¿ Dirección ? ¿ Oficio ? ¿ Edad ? Todo, transitorio.


Provisorio.


Irrisorio.
Pena y risa.
¡ Je, je, je ! Gran ciudad.
Libre albedrío. ¡ No se queje ! Inmensidad del océano. ¡ Ahí estoy !


Dibujándome a mí mismo, con las obras de mis manos.


Recreándome, espejismo.
Eres tú, ¿ Qué duda cabe ?
Aparición. Mi altruismo.
Generosidad. Mi don; talento humano.


Mis estribaciones. Mis picos; mis valles. Mis caderas. Mis codos. Todo, provechoso.


No es facineroso.
No es impío.
Ni pecaminoso.
¿ Soy comida ? ¿ Soy pescado ? ¿ Carne a la parrilla ? ¿ Obedezco ciegamente ?


Soy creador... Pero ya, exploto. Soy creador, y no lo digo. No me alcanza el talento...


Me arrincona.

 

Un torrente este terrenal poema. Me gustó.
Todo transitorio, aunque a veces lo olvidemos; habrá que sacarle partido, con buenas artes, claro, y sin dejar de crear como es el caso.
Un saludo compañero.

 

Gracias, Alonso.
Vale la pena imitar al Señor.
No nos aplasta; no le da tanto coraje como pensaríamos.
Es generoso.