Sin bandera. (Imagen 8 enero)

SIN BANDERA

Yo no tengo banderas;
si acaso alguna sábana
que me envuelve los sueños.
También alguna almohada
y en las noches de frío
echo mano a las mantas.
Yo no tengo un país;
sólo un país no es nada.
Yo tengo tierra y vientos,
a penas tres hectáreas
que invitan a vivir
barrancos y montañas...
Y un mundo compartido
sin lindes ni aduanas.
Yo no tengo un ejército,
con la voz ya me basta:
lo escrito, el pensamiento,
me dictan, son mis armas.

 

Quien vierte todo su ego y su exaltación en un trozo de tela de colores demuestra tener una vista ciertamente corta y limitada. Está bien alegrarse cuando la selección gana el mundial o Nadal el Roland Garros, ir más allá de eso es de mentes cortas y espíritus más cortos todavía. Excelente poema, Alonso. Un abrazote amigo.

 

Uff, Alonso...
Que envidia de la buena e sla que me provocas al leer tus versos, ya que tienes el don de poeta y como tal, saber transmitir tus maravillosos pensamientos/sentimientos, me he sentido totalmente identificada y tocada con cada uno de tus versos, ya que es hermoso poder vivir y sentir la vida, tal cual lo dices en tu poema, dejando atrás el egoísmo y la ambición que solo nos lleva a la guerra con nuestros propios vecinos, y ni hablar de las guerras producidas en el mundo. Encantada estar entre tus versos y dejarte mis huellas.
Un gran abrazo con cariño y admiración, estimado amigo.
Romi

 

letras plasmadas con gran maestria, me gusta, muchas felicidades y que siganlos éxitos, abrazos

 

Ayyyy... que lo que tenía que ser siempre viene sembrado de trampas y de minas antipersona; con el potencial que tienen las personas cuando no sufren de manipulaciones partidistas o estatales.
Muy agradecido siempre por el trato y por la oportunidad de dejar algún que otro pensamiento surgido de la propuesta de una imagen.
Un abrazo con cariño, Ligia, desde este frío peninsular.

 

Somos los humanos seres muy limitados, adictos a las masas que redimen de las personales carencias. Una bandera hace colectivo y en los colectivos la gente se ve más protegida hasta para delinquir.
Muchas gracias, Luis, y en esa onda andamos, sufriendo porque aún nos sabemos seres autopensantes y responsables únicos de nuestros actos.
Un abrazote desde esta "frescoreta valenciana", je je.

 

Hola Romi y muchas gracias por venir a este espacio sin banderas pero llena de personas que se hacen imprescindibles en el contexto de nuestras vidas.
Las banderas, las religiones, las políticas... las creencias ciegas de las masas; !cuanto daño han hecho las imposiciones y los intereses¡
¿sabes?, creo que se pierde mucho tiempo y vida en dar prioridad a las diferencias cuando lo básico y verdaderamente importante es lo que nos une.
Un abrazo con cariño, vecina de la otra parte del mundo.

 

Desaprender el odio que surge de la diferencia y que desde altas esferas se manipula desde un lado y otro. ¡Qué bien lo expresaste!
Esta sociedad tiene una facilidad enfermiza para inculcar odios y dejar de lado a las personas, a los humanos.
Muy agradecido, Luzyabsenta, y completamente de acuerdo.
Un abrazote amigo.

 

Muy agradecido, Poetita, por tu paso por estos versos y por el regalo de tu comentario.
Un abrazo de este campesino al que las lluvias le dieron un día regalado.

 

La riqueza es esto que tan bellamente leo, tan solo la vida que invita a vivir un mundo compartido con sueños capaces de explorar nuevos senderos desde la tierra que pisamos y sin más armas que las que llevamos dentro. Siempre me encanta tu poesía tan bien inspirada poeta Alonso, un gusto enorme leerte, un gran abrazo cordialmente.

 

Bonito alegato a la hermandad de los habitantes del planeta.
Fue un gusto disfrutar tu siempre interesante y hermosa poesía, amigo Alonso.
Un fuerte abrazo, poeta.

 

Comparto tus ideas. Tampoco tengo bandera. Nadie puede elegir el país donde nace.
Te mando un poema que escribí pensando en los refugiados que huyen de la guerra.

EL MÁS TRISTE IDEAL SOCIAL



Es muy triste el ideal
del simple nacionalismo,
el que separa personas
unificando egoísmos
para construir fronteras
con el alambre de espino,
el que para mantenerse
busca siempre un enemigo.
Es muy triste el “ideal”
hecho de alambre de espino.

***
Saludos solidarios.

 

El poeta tiene la tierra de la palabra, el ejercito de las letras y la bandera libertaria de la poesía, con eso logra la felicidad completa en el espíritu. ¡maravilloso poema! Un inmenso placer disfrutar de su exquisita y muy profunda poesía, Alonso Vicent, reciba la más sincera felicitación y saludo.

 

"Yo no tengo un ejército,
con la voz ya me basta:
lo escrito, el pensamiento,
me dictan, son mis armas."


Un placer leerle poeta. Un abrazo fuerte.

 

Hola Nancy, no caben banderas cuando lo esencial para afrontar la vida esta dentro de nosotros mismos y la patria puede ser casual y estar en cualquier lugar que nos acoja.
Muchas gracias siempre, poeta Nancy, por estar en este territorio de exploradores, versos y sueños.
Un abrazote amigo.

 

Las banderas no estarían mal si no se las sacase de contexto, pero se les suele dar más importancia que a los pueblos que representan, y eso ya es degradar a la humanidad.
Muy agradecido, Luis.
Un abrazo con la hermandad por delante.

 

Suele olvidarse la gente de la suerte que ha tenido por el simple hecho de haber nacido en la parte privilegiada del mundo; y no contentos con eso mismo, aun se atreven a explotar y discriminar a los menos favorecidos.
Tristes son los nacionalismos exclusivos como bien expresa tu poema, excelente poema que yo también suscribo. El ideal de excluir, triste ideal.
Muchas gracias, Antonio, y en la misma creencia andamos. Y gracias por el poema. Un abrazote amigo.

 

Señor de tu patria chica, estimado Alonso,
que no tiene más bandera que tu propio señorío,
en la riqueza o la pobreza, sin fronteras ni aduanas,
representas el amor al terruño y la fuerza primera del hombre, su familia y lo suyo,
célula fundamental de la sociedad;
gracias por traer tus inspiradas letras a este foro,
un abrazo,
Eduardo

 

....Precioso y sublime, es verdad....Amar no tiene fronteras y el dolor de cada pueblo lo hacemos nuestro y cada bandera es el telar de un corazón abierto!...Me encanto tu poema!!!! Saludos.

 

Más comida y menos mantel.
Más pasión y menos satén.
Más calor humano y menos uniformes.
Más humanidad y menos banderas...
Las telas, ya lo sabemos,sólo son telas
y tu poema es un lujo, compañero,
para mis ojos chiquitos.

Un abrazo

 

Gracias a ti, compañero, por estar y apoyar aquí a los que nos atrevemos a plasmar y publicar lo que nos ronda por la cabeza.
Un abrazo, Luzyabsenta.

 

A veces creo que llegamos a vivir en un mundo ideal, pero cuando despertamos chocamos con la cruel realidad de los que imponen sus partidismos.
Muchas gracias, amigo Daniel, por formar parte de este ejército de palabras e ilusiones.
Un abrazo.

 

Muchas gracias compañero y feliz de que fuera de tu agrado este poema, imagen de banderas que separan más que unen.
Busqué en tu perfil tus poemas, pero no vi ninguno. Espero verlos y leerlos pronto.
Un saludo hasta México, Armenta.

 

Que bien lo vio, señor Eduardo. Esa es mi patria: la que nace del calor cercano, del contacto con la tierra y con las gentes sin distinción de creencias, banderas o razas y que pasan por nuestras vidas.
La familia no solo nos es dada, también se forma y va creciendo aunque no haya lazos consanguíneos.
Muchas gracias desde esta patria chica y un abrazo.

 

Tienes toda la razón. No debería tener fronteras el amor al prójimo, sin embargo los mismos países y las mismas religiones fomentan el odio hacia los que supuestamente son diferentes. Qué buena imagen la que propones, "el telar de un corazón abierto", el sufrimiento de otros pueblos que hacemos nuestro.
Muchas gracias, Marisol, por acercarte a este telar de versos.
Saludos.

 

Ayyy esos ojos chiquitos que saben del verdadero alimento del ser humano, que es el calor que se da y que se recibe por amor al arte de la vida.
Estos ojos achinados te agradecen las miradas y el calorcillo, amiga entera Rosario.
Besos y algo de cafeína con algún dulce para el desayuno.

 

Excelente romance Alonso un abrazo