No todo se acaba

No todo se acaba

Qué triste debe de ser,
pensar que todo se muere,
y lo total que se quiere
tiende a desaparecer;
y en nada más que creer
que en este cuerpo precario,
como único escenario
de nuestra totalidad,
abandonando seidad
a toque de campanario.

Dicen que todo trabajo
es un esfuerzo tan vano
y que todo ser humano
se descompone de cuajo.
Permanecemos tan bajo
sin perspectivas del cielo,
por creernos el camelo
de los sabios de la ciencia,
que solo tienen consciencia
de las virtudes del suelo.

No es que sea creyente
de la Biblia a rajatabla;
ni de Moisés con su Tabla,
sea mi texto frecuente.
Mas mi corazón disiente
en contra lo establecido,
por solo ser admitido
la simple fisonomía
en la ilustrada abadía
del terrenal desmedido.

¿Cómo pueden fallecer
nuestros más nobles valores?
igual que nuestros errores
que deben de fenecer.
La vida es aprender
de las faltas cometidas,
hasta que tú te decidas
a colocarle final,
y mientras lo hagas mal,
derrocharás muchas vidas.

Dicen los grandes maestros
de la espiritualidad,
que la nuestra actualidad
viene de actos ancestros;
y ni con los padrenuestros
no los podemos cambiar,
sin lograr abandonar
nuestra conducta perversa,
mientras nos sea adversa
a la manera de amar.

Éstos grandes avatares
en el tiempo que aparecen,
a los hombres abastecen
de sus Verdades sin pares;
pero los nuestros andares
aun no los pueden seguir
y prefieren recurrir
a sentidos engañosos
que solo nos dan los gozos
que nos llevan a morir.

Hay bastante que aprender
sobre los sabios ancestros;
no solo con padrenuestros
hacen al hombre crecer.
Mas creer o no creer
es nuestro presente lema:
mal comprendido su tema
concebimos nuestros juicios
llevando los beneficios
los que dictan el sistema.

Ya lo sé que en este mundo
solo vemos lo exterior,
considerando sopor
nuestro interior más profundo.
Pero para el bagabundo
esta manera de ver,
lo conduce a comprender
y lo transporta al acierto
del que vive más abierto
al futuro amanecer.

En esa bella alborada
nuestra mente se ilumina,
y la gnosis se avecina
a nuestra alma consagrada.
Porque al sentir la llamada,
nadie se puede negar,
si no quiere siempre errar
con nuestros burdos sentidos
y los cerebros dormidos,
por no querer despertar.

La única lucha que quiero
es dominarme a mí mismo
con el yoga o el sofismo,
o por otro derrotero;
y repudiar el dinero
por el corazón valioso
dejándome muy gustoso
placeres de hoy en día
que solo tienen la guía
del egoísmo forzoso.

No sé si conseguiré
lo que tanto he soñado,
inconsciente o despertado,
y de lado quedaré.
Lo que queda viviré
esperando la fortuna
del que con él mismo puna
en contra de los sentidos
aunque gritando alaridos
del que nace en mala cuna.

(Once décimas)

Castro. 11 de febrero del 2017.

Corregido gracias a la ayuda del maestro Elhi.

 

¡Tremendo derroche de inspiración, estimado Enrique! ¡Nada más y nada menos que 11 décimas! Es fácil decirlo, pero no escribirlas, siguiendo el sentido de la temática y prestando atención a los detalles formales. Me parece un poema muy personal, muy sincero ─cosa siempre apreciable─, una descripción bastante clara de tu carácter humano y tu espiritualidad. Admiro a los que van detrás de esa búsqueda, aunque no tenga sentido para mí, porque la pasión mueve el conocimiento y el conocimiento nos hace libres. Espero que los años te colmen de paciencia y salud, que encuentres lo que con tanto entusiasmo poético nos declamas en en estos versos y que brille para ti, cada vez con mayor intensidad, la luz de la sabiduría.

En la cita, detalles métricos importantes. Repara en cada uno de ellos para que tu poema quede impoluto en ese sentido. Un abrazo, y gracias por el instante de reflexiva y grata poesía.

 

Haciendo los oportunos arreglos te quedaran unas excelentes décimas.
Un placer de lectura.

 

Intentaré enmendar el entuerto, maestro Elhi.
Gracias por el tiempo que has perdido conmigo.
Castro.

 

Gracias al maestro Elhi que mpierde su tiempo con unos como yo.
Cracias por la lectura.
Castro.

 

Jajaja No digas eso ni en juego, mi querido amigo. Ya sabes que para mí es un placer orientar a los demás. He leído tus décimas con mucho interés y te he dejado mis apreciaciones, muy personales, acerca del fondo y de la forma para tratar de lograr un equilibrio en la crítica. No siento que pierdo el tiempo ayudando a los demás; por el contrario, algo bueno siempre sucede cuando el poeta recibe, más que el acostumbrado elogio, una invitación a detenerse a pensar en los detalles.
Un abrazo y feliz fin de semana.

 

Te felicito por este arduo trabajo de lograr describir en once décimas tus creencias y el significado personal de tu búsqueda espiritual, que supone unos valores altruistas muy grandes y que felicito tambien con agrado

 

Muy buenas décimas (ya corregidas con la ayuda del amigo y maestro Elhi).
Pues yo, a veces, pienso lo mismo. Creo que sentires, emociones, sensaciones, pensamientos, etc etc, todo eso que es nuestra pura esencia y es intangible, no muere con nuestro cuerpo. Creo que navegan de forma imperecedera por las infinitas esferas del arcano Cosmos, bien para unirse a un TODO, bien para volver a incrustarse en otra masa corporal en éste u otro Planeta, en un ciclo de muerte y resurrección continuo. O, al menos, es lo que quiero creer, jajaja.

Un fuerte abrazo, querido amigo.

 

El grupo de CONCURSOS, le invita a participar en el próximo concurso “SONETO” 2017,

http://www.mundopoesia.com/foros/temas/bases-del-concurso-soneto-2017.625976/#post-6162231

Esperamos que sea de su agrado.

Atentamente.

GRUPO DE CONCURSOS.

 

Yo tambien he tenido mis dudas mas al no tener la mente en el último pedestal las he logrado acallar. Claro que nos cuesta creer el hecho de la reencarnación mas es el único ladrillo posible a la caducidad de lo físico. Ma muerte corporal es, como decía Shakespeare, es el baño del olvido.
Un fraternal abrazo y gracias por comentar.
Castro.

 

Esplendida Obra estimado Poeta !.. 11 décimas, con tus profundas reflexiones poéticas , donde impartes tus conocimientos y espirtualidad con gran vivencia y sentimiento. Mis felictaciones y cordiales saludos.

 

Casi todo viene de mis autores preferidos: Aurobindo, Yogananda, H. P. Blavatsky y de la tradición espiritual de todas las épocas.
Creo a pies juntillas en ellos, porque le dan al ser humano una dimensión de la que el materialismo carece.
Un cordial saludo.
Castro.

 

Te leo siempre en esta temática, y sigue persistente en el camino espiritual, dándote el lugar del simple ser humano que reconoce su divinidad. Mira que has tenido al amigo Eli Delsue como maestro, y veo que te han invitado seguro que has participado.
Me alegra mucho porque en parte sigo tus creencias. Un abrazo y siempre es grato encontrar alguien que sigue un camino y no teme
a equivocarse. Abrazos.-