Escuché tu voz

Escuché tu voz
en el arrullo del viento
que calma mi lamento
y toca a mi corazón.

En lágrimas de plata
que mojan mis mejillas
cuando rezo de rodillas
para que vuelvas tú.

Pero así como llegaste te fuiste
rápido y en silencio lejos de mí
descubrí que el amor si existe
pero que él está lejos de aquí.

Escuché tu voz
al oír mi nombre
era a otro hombre
al que alguien llamó.

Y me quedé así
pensando en ti
que le sonreí
a tu recuerdo.

¿Quien hará entender a mi corazón
que no pudo ser nuestro amor?

Caminé descalzo
en piedras filosas
se selló mi boca
cuando no te hallé.

Y mis besos murieron
al no hallar tus labios
no hallaron motivos
para esperar más.

Es la misma historia
uno ríe, el otro llora
siempre el que sufre
es el que quiso amar.

Escuché tu voz
y me quedé callado
pues he escuchado
que me dijiste adiós.

 

Me ha encantado este bello y melancólico poema. El amor a veces no puede ser aunque queramos. Saludos