Pero, ¿Que quieren las mujeres? Lo sé, la que me va a k er.

Ya sé lo que quieren
Quien más quien menos
A las mujeres me refiero.

Que las quieran
a quien quieran,
ellas, solo a ellas,
por supuesto.

Porque todo lo demás
Las incomoda, las cabrea
Para esto son muy suyas.

Espero por fin acertar
O me caerán mil pullas.
A lo mejor por mi parte
sea falta de cordura,
revelaros su secreto.

Esto lo sé, por mi ser femenino.

La q m va a k er
A tamaña reacción
ni en monosílabos, me atrevo.

Porque nunca se perdona
A quien esta al corriente
de tu mas profundo secreto.

Perdonarme pues,
soy un naturópata
en mi es natural
meter mucho la pata.

 

La mujer busca la manzana.
El hombre quiere la naranja.

 

Cuando están muy seguras de que las quieren entonces comienzan a querer otras cosas. Saludos cordiales para ti Fulgencio.

 

No observo que metas mucho la pata en estos versos tuyos, estimado compañero. Ya ponía Antonio Machado en los labios de Abel Martín lo siguiente que va bastante en la línea de lo que expresas, a mi humilde entender, claro está. Decía esto:

Sin mujer
no hay engendrar ni saber.

Te mando un saludo muy cordial.
Salvador.

 

Ya ves, estimado poeta que D K ER nada, al menos de momento y si K E, abres el paraguas.
Simpático tu poema.
Un saludo

Alfonso Espinosa

 

Sin mujer
no hay engendrar sin saber.



Dios como me gusta rectificar a los grandes, a veces solo un acento o una coma.

 

Eso, desde luego, también.
De nuevo mis saludos.
Salvador.