L.G.B.T.I 6

Hay recovecos en el alma,
cauces que llevamos por dentro,
manantiales que provienen
del deseo más genuino y auténtico

Quién le va a decir a tus manos con alas
cuando acarician su cuerpo que no.
Quien le va a impedir que vuelen sus ganas
cuando estás cerca.

Cuál es el necio que los condenará por esto de amar.
Qué infame levantará la voz siquiera para detener
el vendaval de sentimientos que se desatan
en ese encuentro de dos.

Y qué si hay unos otros que los señalan con el dedo
porque sus ramas son verdes y no se encienden.
Y qué si pretenden apagar ese fuego
con sus falsos argumentos y el agua de sus credos.

Y qué si se aman igual: así como eres así como es,
aunque los condenen con sus qué dirán
y la pobreza de sus pobres espíritus penitentes.
Ve que amar sin permiso vale más y es más valiente.

 

Hola Luis! Gracias. El tema lo propuso un compañero de Tensón y aquí estamos tratando de estar a la altura de lo sensible y amplio que puede ser el mismo. En poesía uno tiene múltiples opciones por donde deslizarse y por donde mirar, pero debe elegir un camino por donde transitarlo y una hendija por donde vislumbrar aquello que quiere exponer. Yo aquí quise ponerme en la piel de quien tiene que nadar contra corriente cuando elige a quien amar. Ya no tanto como en otras épocas de persecución y miedo pero igual y cada cual su caso, enfrentándose con la necedad y la incomprensión.
Considero el deseo como el motor que nos impulsa, aquello que somos y aquello que queremos ser o hacer es la esencia de toda persona. Coartarla es matarla de a poco.
Un abrazo y gracias de nuevo por estar.

 

Ante todo ser auténticos, pese a las cortapisas y a las dificultades que sin duda llenan los caminos de quienes se salen de un patrón preconcebido.
Permisos para amar no existen. Si el amor es física y química, no se debe luchar contra lo elemental... sí contra los malos elementos.
Muy buena incursión en este humano tema, Malena, y encantado de venir a los espacios en los que reina el sentido común.
Un abrazote.

 

Hola Alonso. Este tema ha sido un reto para mí al menos, pues la poesía no suele ser literal, al contrario uno dice lo que dice de tal modo que los significados están sugeridos o velados. Y hay cuestiones que requieren de contundencia, y no de la lectura entrelineas que conlleva el texto poético. Como es este caso en el que hablamos nada más ni nada menos del derecho más elemental como bien dices tú. En definitiva por más que lo volviera a intentar siento que mi poesía no alcanzaría a abarcar la relevancia que requiere una propuesta como esta.
Un abrazo y gracias por tus palabras que siempre son bien recibidas.

 

Me ha gustado mucho el empleo de esa anáfora (y qué....y qué....y qué), que es muy significativa amén de embellecer el poema mediante ese recurso retórico.
Has poetizado el tema de la homosexualidad de forma directa, sin subterfugios, clarito y contundente, y eso también me gusta.
Aunque ya no es como era (y no hay que irse muy atrás; durante el Franquismo, en España, habían leyes que coartaban la libertad sexual, incluso a los heterosexuales se les oprimía; recuerdo que un policía me impidió seguir besando a mi novia en plena calle con la amenaza de llevarnos a comisaría por ""atentar contra la moral en la vía pública", jajajajajajajaja. De risa, y de chiste, jajaja), bueno, pues eso, que aunque ya no es lo que era, aún quedan rescoldos de aquellas hogueras; no hace más que unas semanas, una Asociación de Católicos ultras, fletó un autobús condenando la homosexualidad, y un obispo dijo: ""Los homosexuales arderán en el infierno"", en fin, ya ves como está el panorama.
Que a estas alturas aún se sientan marginados aquellos que, en su más hondo sentir, en su esencia, han elegido otra opción para encontrar la felicidad, es dramático. Porque todavía, a pesar de todo, pues, al menos, las leyes y la constitución recogen ese derecho, todavía se huele el tufillo de los intransigentes, de los hipócritas, de los inquisidores.
Te aplaudo por lo que has escrito.
Besos, bonita, besos en alas de los vientos.

 

Gracias José por tu presencia en mis letras y por la reflexión que me aportas. Con respecto de cómo han ido cambiando estas cuestiones a lo largo del tiempo, te comento una anécdota personal. Estaba mirando televisión con mi hijo de 11 años y se mencionó esta cuestión de la discriminación a los homosexuales. Mi nene me dijo de manera categórica que era un diparate discriminar a la gente por eso, que aquellos que los discriminan son los que se quedaron en el siglo diecinueve. Creo que en ese sentido estas generaciones que vienen ya lo traen resuelto. El ideal se va a dar cuando ni siquiera sea un tema que amerite un debate.
Un abrazo.

 

Tu hijo, es evidente, ha gozado de una educación sana impartida por su madre. Y sí, ojalá que pronto estas cuestiones estén tan superadas que no sean tema que ameriten el debatir sobre ellas..., ojalá.
Besos, preciosa esencia femenina allende los mares, besos en alas de los vientos.

 

Estimada, Malena...
es lamentable haber llegado al Siglo XXI, y todavía tengamos que escribir poesía sobre este tema, que ya debería ser algo natural, como respirar, que cada quién pueda vivir su vida sexual y sentimental, tal como lo sienten internamente, y no tener que sentirse juzgado por sus pares, pero hay sociedades en general, y personas en particular que aún no son abiertos a estos temas y siguen viviendo como un tema tabú... Como bien dices en estos versos...

Cuál es el necio que los condenará por esto de amar.
Qué infame levantará la voz siquiera para detener
el vendaval de sentimientos que se desatan
en ese encuentro de dos.

Y ni que decir estos versos finales, para mí, son magistrales..

Y qué si se aman igual: así como eres así como es,
aunque los condenen con sus qué dirán
y la pobreza de sus pobres espíritus penitentes.
Ve que amar sin permiso vale más y es más valiente.

Un gran abrazo gran poetisa y compañera, siempre es un placer llegar hasta tu rincón de letras

 

Gracias por tus letras, este tema es un tema donde el mundo del poeta hace un canto a la libertad, y se aleja como siempre de todo convencionalismo, me siento orgullosa de pertenecer a él


Un abrazo Malena


Carmen

 

¡Fantástico este tensón Malena! por su enorme serenidad con las cosas del querer.El gesto de amar, su elección, es absolutamente privado y personal, nadie tiene derecho ni a juzgar ni a condenar.
Me ha encantado este "amar sin permiso"
Saludos y feliz tarde

 

Ninguna igualdad hará que la gente deje de preguntarse dónde se esconden los huevos las tranx, ah, por cierto, a los hombres heterosexuales les gusta el porno lésbico... Pero entre mujeres reales ps.

 

Gracias Carmen por tu presencia generosa...sin dudas la voz de los poetas también se tiene que elevar en contra de lo que considera injusto. Gracias a Sebas que planteo un tema sensible y que nos insta a tomar postura.
Un abrazo.

 

Gracias Valen por tus palabras, hace bien saber que con la poesía salen a la luz esos acuerdos que venimos haciendo muchas personas de privilegiar siempre el derecho a ser feliz según cada uno quiera.
Un abrazo.

 

Hola Valerie. Sí es verdad, eso es muy díficil de manejar porque tiene que ver con pensamientos muy arraigados, pero de última es morbo y la verdad que si esa curiosidad está ligada a la sexualidad me hace mucho menos ruido que aquella que tiene que ver con el morbo asociado a la muerte por ejemplo. Fijate que en facebook ponele uno se puede topar con que alguien livianamente suba imágenes de gente mutilada o enferma o lo que fuera, ahora si se trata de desnudez ni siquiera creo que las puedan publicar. En definitiva parece que morirse está permitdo pero vivir y gozar está mal visto
Gracias por pasar por aquí.
Un abrazo.

 

A lo que iba, es que todo el mundo, incluída ud, se pregunta donde se los esconden, y que el hombre heterosexual, por más intolerante que sea, no lo es tanto como para pajearse viendo a dos webonas meterse el dedo, más simple, la igualdad no existe, no debe existir, lo que debe existir, es la falta de hipocresía, cuando dejemos de ser hipócritas, veremos que todas aquellas "razones" por las que creemos algo, son sólo eso, "creencias" y adivine qué, detrás de cada truco de magia descifrado, nunca hay magia.

 

Mirá Valerie me he preguntado muchas cosas en la vida pero jamás cosa semejante, de verdad que no. No estoy excenta del morbo pero no va por ahí...Releí mi poesía para ver si utilicé la palabra igualdad y la verdad que no la mencioné en ningún momento porque al contrario se trata de reivindicar las diferencias y las ganas de que cada uno haga lo que se le cante. Eso también incluye que a un tipo le guste ver a dos mujeres haciendo lo que también tengan ganas.
Lo último no lo entendí...lo de la magia.