Pásalo divinamente.

Lo que tú quisieras, para toda una vida,
pídeselo a Santiago apóstol, en su catedral correspondiente.
¿ Será el milagro que cura el resfriado ? ¿ Una pastilla efervescente ?
¿ O tener seso en la mollera, como el espanta-pájaros del Mago de Oz ?


Buscamos una salida, para bucear en ese laberinto sumergido.


Sucede en las tres dimensiones del espacio.
Como magníficos delfines, o dragones...
Pero el Tiempo transcurre gota a gota, muy despacio.
Cae del grifo semi-abierto el soliloquio monótono y profundo.


¿ Averiguaremos cómo convertirnos en alguien ? O vamos a ser, siempre, algo maravilloso.





Somos Creación, manifestación, latido.
Somos Universo de un Absoluto.
Somos criaturas que intentan pasar inadvertidas.
Para llegar al cielo, inmaculadas e impolutas.


¿ Por qué nadie se atreve a pensar que Dios es un hijo de Puta ?


Tenemos pruebas evidentes: Quiere pasarlo en grande, como los indios.
Pasarlo bomba: ¡ Big Bang / Big Crunch ! De Puta madre.
Cargando al máximo, las pilas. Con energía suficiente, para ser célebre, sin agotarse.
Sin enojarse ni reírse. Sin amilanarse o achantarse ante nada.


Vive en el corazón de cada huésped. Es un Sansón y un Salomón, en cada Biblia.

 

Muy bonito tu poema que me ha encantado leerte. Un abrazo amigo.

 

Gracias, Paloma. Es una visión apocalíptica, del tránsito hacia la Iluminación.