El concierto

El azul intenso del cielo,

propio de un cuadro irreal,

me ciegan los ojos,

me alegra el alma.

Como el apacible aire

que entra por la terraza

esta mi animo,

movible, sereno , cálido…

Circulando por todos los rincones de mi vida.

Casi siempre trato de asegurarme

el ritmo de un concierto en mis quehaceres.

Controlado, pero ha veces con notas altas,

ha veces quedas,

casi inaudibles

que armonicen con un conjunto

fabricado en mi cabeza primero

y después llevado a la practica.

Es como un pentagrama

que encasilla a las notas,

que según su posición

chillan o callan,

que las encarrila

y las hace hablar

con las voces sólidas

del pensamiento.

Todas esas notas,

esos colores,

el aire,

los contemplo en mi terraza,

los veo cuando cierro los ojos

y me siento bien con lo que tengo.

 

Optimista mirada para ese entorno que te invita na sentir arpegios celestiales.

 

Recorrido por esas semillas de emociones que ofrendan claros sentimientos y a la vez
nos ofrecen exquisitos y melodiosos versos.
Saludos.
Eban

 

Armonia de contemplacion que se hace arquitectura
de sedientos sentimientos. las formas y el ambiente
creando una coleccion de cromatismo y aroas que
permiten cerrar los ojos en una reverberacion
de intimidad. excelente. saludos amables de
luzyabsenta

 

Un dueto tus letras Sergio
Un abrazo
maria

 

Un placer, Maramin que te guste mi poema
Un abrazo
Maria

 

Es un placer para mi que te guste lo que escribo
Un abraza, Paco.
Maria

 

Como siempre, un alago tu respuesta
Un abrazo
Maria