Esquiadora.

Me pusieron en tela de juicio,
porque prefería la castidad, al fornicio.
Pero no me gusta el planeta Tierra, lleno de vicios.
Sino que la misión particular de cada espíritu, es el Servicio.


Entonces, me empujaron al erotismo.


Que era onanismo, mezclado con senderismo y moto-ciclismo.
Había que acariciar a las máquinas aerodinámicas, y estar en forma.
Resultar natural y divertida, es la norma.
Para que descanse de sus labores el Lazarillo de Tormes.





Descubrí que el Gran Punto Cardinal, u Oeste, es enorme.


Muchos eran los llamados, y pocos, los elegidos.
Si no sufres, no eres dichoso; era el lema que me protegía.
Ya que el abuso también pretendía
apoderarse de Andalucía.


Pero si el timador va corriendo, la dama desnuda ¡ Esquía !

 

Siempre divertidos tus poemas amigo, saludos, que vaya todo muy bien.

 

Me alegro de que te gusten, compañero.
Intento compartir mi Sabiduría.
Pero finalmente, sólo queda el Humor.
Pues somos seres actuando en un sin-fin...
En el cuál, intentamos ser graciosos. Con coraje.