La esencia del viento.

Aire, alma y vida,
en caída vertiginosa
por el tiempo.

Si cae mi cuerpo
mancillo tú recuerdo,
sonrisa que deleita
el brebaje y su embrujo
sobran dome palabras.

Si caigo
no recojas los pedazos
pues yo,
estaré ausente
para recibirte.

Es posible,
qué dentro sea piedra
y oculte para siempre
tú recuerdo.

Solo mio
de nadie más.

Así, mi deseo fluya
entre riscos
silencios que callan
amores desconocidos.

Hoy pinto
mientras otros versan
hoy sueño
mientras otros hablan,
nada importa, ni hiere
lo mejor de ti,
pues tengo muy claro
quien eres tú
y lo que representas.

Nunca fue mio
este corazón
víscera del tic-tac,
alguien lo robó
allende los mares
azote de tramontana
camino del faro
de los navegantes.

El viento sopla niebla
la vista al mar
azul se imagina
la esencia que le envuelve.

 

Un honor señor Maramin, su presencia reconforta y anima a seguir.