¡La mujer que me trae de rodillas!

No escribí meditando en tu mirada,
ni en la risa que fluye con el viento,
ni en las manos de seda nacarada,
ni en los besos que cortan el aliento.

No tomé lo insondable de tu esencia,
―la pasión que flirtea en tus deseos―,
ni tampoco hice gala de abstinencia,
en los versos con que quiero atraeos.

No busqué que el presente te turbara,
hasta ver sonrojadas tus mejillas,
yo quise, que de mí se enamorara,
¡ la mujer que me trae de rodillas!​

 

Suele pasar que anhelamos que nos amen sin medida, el 99 por ciento de las veces la realidad se impone a nuestros sueños de conquista. Me ha gustado amigo puroamor. Un abrazo. Paco.

 

Muchísimas gracias amigo Paco por tu siempre amable comentario.

Abrazo cordial,

puroamor

 

Pues eso es lo mismo que buscamos todos, algunos con más suerte que otros. Un gusto pasar por acá y leerte.

 

Qué hermoso poema que trata de que la mujer que te trae de cabeza, se enamore de ti , querido Puro amor.

 

Estimado Roberto, muchísimas gracias por pasar por mis letras y plasmar tu amable comentario.me agrada que te haya gustado.

Saludo cordial,

puroamor.

 

Hola querida Edith, siempre es grato recibir un comentario tuyo para uno de mis poemas. Muchísimas gracias por pasar y compartir tu mensaje.

Saludos, abrazos y besos,

puroamor.