No correspondida

Gracias por ablandar mi corazón,

por haberme hecho más humilde,

por conectarme más a él,

porque ahora lo escucho mejor,

por fortalecerlo, por amarlo,

por darle paz, seguridad, bienestar,

y esa ávida e inalcanzable esperanza

que persigo con tanto ímpetu.

Ahora confió más en el Amor Universal,

que ahora se llama así,

por no aceptar que todo amor viene de Dios;

y ahora creo más en los buenos sentimientos

que perviven en cada corazón.

Puede decirse que hoy me siento

más en paz conmigo misma

y con los seres humanos

que me rodean.

Mi alma respira, se siente aliviada,

hasta salvada;

ya no huyo ni me escondo

detrás de las murallas de mi pueblo.

Porque el amor no teme,

es valiente, tiene agallas,

no se detiene, y vuela alto

como las gaviotas del Pérsico.

Todo está dentro de mí:

lo bueno y lo malo,

la verdad y la mentira,

la bondad y el egoísmo…

Pero sólo brilla lo bueno,

las flores hermosas,

las estrellas con vida

o fugaces como fue mi amor contigo.

Y también los corazones enamorados,

las sonrisas que brindan amor

a los más necesitados y vulnerables…

¿Qué más puedo pedir?

He pedido y se me ha dado

he buscado y he hallado,

he amado y me han amado,

he llorado y Dios me ha consolado,

He comprendido y al Amor me he rendido.

Sentirme libre he pretendido,

y esta primavera renacerá en mí

una grácil y hermosa mariposa.

Puede ser que correspondida o continúe

sin serlo.

¿Qué más da, si el Amor brota

en mi corazón?

El Bien y el Mal ya no luchan en mi interior,

ahora sólo lo hacen en el exterior…

Pero aún así, hombre de mi otra mitad,

te respeto

pero hace tiempo que dejé de comprenderte;

porque tu rechazo me enseñó.

 

Así habla una dama evolutiva.
Yo voy por el mismo camino que tú.
Por eso, somos compañeros.
La belleza está en el interior...


¿ Quién llegará primero ? No se sabe...


¿ A dónde hay que llegar ?
A compartir.
Nada más y nada menos.


Como el sueño de Martin Luther King: Todos, reunidos alrededor de la misma mesa. Gente de todas las regiones del mundo. Hablando un mismo idioma. Y respetándose, unos a otros. Incluso admirándose... Mutuamente.

 

El Bien y el Mal ya no luchan en mi interior,

ahora sólo lo hacen en el exterior…

Pero aún así, hombre de mi otra mitad,

te respeto

pero hace tiempo que dejé de comprenderte;

porque tu rechazo me enseñó
Todo lo que escribes es una reconciliación contigo misma, pero hacia el final toma otro rumbo, casi como para dar pie a otro tema. Saludos cordiales para ti, despertando.

 

Muchas veces sucede, perder para aprender, el amor como bien dices lo fabricamos nosotros mismos, no viene de ningún sitio, cuanto más fabriquemos mejor viviremos seguro.Me ha gustado amiga despertando. Abrazote vuela. Paco.