Placenta de Lilith

¿Acaso son los ojos heridas abiertas
siempre propensas a sangrar?

¿Acaso son los ojos recordatorio
de que llegamos aquí llorando
y que el camino inevitable a la tumba
comienza en el vientre de la madre?

¿Acaso son nuestros ojos el precio a pagar
por ser descendientes del pecado?

27/07/2018
Ian Salas

 

Lilith puede ser considerada una mujer de piedra.
O sea, perteneciente al reino mineral.
Por su parte, Superman es el hombre de acero. Metálico.
A su vez, los humanos somos buenos filósofos, por naturaleza.
Y como la Sabiduría se hermana con la serpiente, tendremos algo de reptil.
Si no en los genes, al menos, en el comportamiento. Prudente y cauteloso.
Finalmente, la vida es un soplo, pero también, un milagro.
Y se ampara en la dualidad macho / hembra.
O sea que siempre ha de haber compensación.
Así, la mujer respira aliento varonil, mientras que el hombre vive a base de aires maternales.
Por ello, si ves un grupo de muchachos, todos ellos bravos y hercúleos, imagina que por dentro de sus mentes, hay animadoras de baloncesto, que agitan sus pompones, llenas de orgullo. Y las doncellas, por su parte, todas reunidas, me recuerdan a un ejército de soldados curtidos en mil batallas. Ése es el milagro, compadre.

 

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