El traje

Siento curiosidad por mi traje vacío,
cuelga sin pudor de una percha metálica,
se nota el hueco de mis músculos en su blando perfil,
es una incógnita que vibra en el aire como un ángel de lana
o una marioneta vieja. Tal vez en el tejido cruzado
de la americana un relámpago escribió la ruta
de la noche, tal vez la prosaica sed de los pantalones
o la camisa monocolor fueron la máscara de la desnudez,
tal vez en una habitación en penumbra la ropa sea el olvido,
mi voz la llamada, tu cuerpo la piel que se entrega al combate
de dos vientres y su resplandor.

 

Buen poema, me alegra estar en tu espacio y disfrutar de estos versos.
Un placer como siempre leerte, un abrazo fraterno.

 

Gracias, jalvarez, por tu amabilidad. Un abrazo.

 

Diria que ese traje fue un testigo del combate.
Un gusto leerlo
abrazo al medio dia

 

Siempre bella la sensibilidad que desborda cada imagen querido amigo...
Me acordé de una canción...si me permites, te la comparto...

Un gusto leerte... te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Gracias, ladulcec, por la lectura y el comentario. Un abrazo.

 

Gracias, amiga, Nancy, por el comentario y la canción. Un abrazo.

 

una interesante manera de vestir tus versos grato leerte

 

Gracias, Marianne, por tu lectura y palabras. Un abrazo.