La chica de ojos infinitos

Sin duda alguna ha sido un privilegio conocerla,
Ella fué mi karma y mi enseñanza ¿sabes?
con la que aprendí a perder la cabeza,
a dejar que otra alma se acerque y a volar como las aves.

Sin duda alguna ha sido un privilegio amarla,
dejar llover sobre este desierto de dudas y resentimientos,
alterar el clima de mi forzada calma,
permitiendo entrar las olas y los vientos.

Sin duda alguna ha sido un privilegio perderla,
poco a poco aprender sin ella a vivir,
recordar sin dolor su mirada esmeralda,
y aprender por ella a dejar ir.

Sin duda alguna ha sido un privilegio olvidarla,
enterrar su recuerdo ya olvidado,
perderme en otro besos y otro karma,
oxidando sus memorias en pasado.

Sin duda alguna ha sido un privilegio reencontrarla,
despojarme de rencores y de mitos,
he aprendido con nostalgia a no esperarla,
a la chica de los ojos infinitos.

 

Todo un recorrido por el amor en todas sus facetas, bella escritura para un sensible contenido. Un abrazo amigo comarcr. Paco.

 

Muy honrado por tu mensaje, muchas gracias.

 

Sentido y dulce poema, un gusto visitarte.
Saludos.