La mesa testigo (para ti Eduardo)

La mesa testigo (para ti Eduardo)


Fuiste testigo del paso del tiempo

tu halo rodeaba las risas y voces

difusas imágenes confluyeron

bullicio de tiernos niños pasaron

patines y ciclomotores cien cruces

llenaron con risas la pista central

los dados en tabla de juego cayeron

no ganan ni pierden resulta casual


Fuiste testigo y sostén del festejo

asado, bebidas y demás manjares

sirvieron los jóvenes con rapidez

se siente el chachareo del familión

florecen las hojas de la catalpa

quedando sus luces en atril real

declama el poeta en esta reunión

pasión de su vida un poema virtual


De rojo comienza a pintarse

la noche buscando el reposo

se viste de gala su fiesta final

 

Gracias Luis por tus lindas palabras y que hayas interpretado tan bien mi sentir ante esta mesa con tantos recuerdos. Con cariño Carola

 

Gracias Antonio por pasar por mi escrito, me ha alegrado que lo hayas leído, es así como se siente, muy fuerte su recuerdo, ya lo sabes, llenaba el espacio. Con cariño Carola

 

Me emociona mucho llegar a este versal de tu mano querida Caro y tan puntual por la luz del recuerdo haciendo un camino precioso de versos, donde tu alma cuenta de ese universo, centro como lo es la familia. Y especialmente, la dedicatoria de tu corazón...

Mi abrazo y felicitaciones por el protagonismo que envuelve este hermoso poema.
Camelia

 

Qué honor que hayas llegado tu a mi versal y que entiendes de mis sentimientos que afloran por la intenso del recuerdo. Agradezco tu cálido comentario, con cariño Camy

 

Caro querida, ese familión y esa mesa han tenido la dicha de saber de la alegría. Que prevalezca, que se sobreponga a la ausencia, porque solo es física. Los recuerdos nos sostienen la esperanza de un reencuentro, en un mundo que por hoy no vemos, pero al que todos estamos destinados a regresar, es ese hogar donde no existe el dolor, donde todo se comprende mejor. Eduardo se les adelantó en el camino, mas les dejó tanto para seguir que será sencilla la paciencia. Sabes que te aprecio con el corazón. El amor no muere, y se multiplica cuando lo alimentamos con nuestros pequeños gestos. Una sonrisa agradecida, por ejemplo. Abrabesos a tu alma y a tus preciados recuerdos.

 

Gracias por tu gran interpretación de estos recuerdos que son imborrables, me ha gustado mucho tu comentario. Saludos con cariño Luzyabsenta

 

Mi querida Rosanna que gusto ver que has leído mis recuerdos, siempre siento necesidad de transmitir a sus amigos poetas estos pensamientos y tus palabras las recibo como un bálsamo que me reconforta y te agradezco enormemente. Con cariño de amiga te saluda Carola

 

Quedan los recuerdos de los momentos vividos en familia. Hermoso poema dedicado a Eduardo. Gracias por compartirlo. Me ha gustado mucho tu poema. Un abrazo.

 

Que encantador poema nos regalas


Grato leerla

 

Muy agradecida del paso por mis recuerdos, con cariño te saluda Carola