Encantadoramente ruin

Déjame que te mienta de lo lindo.
Adoro la ficción que te rodea.
Ganarme tu atención es mi presea.
Con la vulgar desfachatez colindo.

A tu encanto simulo que me rindo.
Y finjo como finge la marea
a punto de arrasar lo que desea.
Con tu gota final de sangre brindo.

Después del estallido llega pausa
y otra misión letal así perpetra,
en mi nombre, su crimen vieja causa.

Una advertencia al pie de cada letra
y un proceso seguro se me encausa.
Voy mejor de arqueólogo por Petra.



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Y yo que moría por un comentario
Besos, catia.

 

Es verdad. Muchas veces me ciño a la estructura como excusa para meter una historia que poéticamente queda al debe. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo, Ricardo.

 

Eso es lo que tienes!!!

 

Y...no entendí
Abtazos, Ángel.

 

Lindo!
Pero si el personaje es más malo que el natre.

Besos, Lorelizh.

 

Siempre he pensado que una explicación echa por tierra todas las posibles interpretaciones, y esa es la parte divertida. Un abrazo. Juan Ramón.

 

Aaaaaa!!! rqueología.
Abrazos.

 

Si si...muu malo.

 

En lo que a mí respecta, el misterio es siempre un buen aderezo casi de cualquier cosa. También es verdad que una vez extinto lo acordado, pierdo interés por el 'tema' , a menos que, sin saber muy bien por qué, se cree un vínculo. Me uno a la legión de egiptólogos que tratan de descifrar las claves de la motivación y la conducta. El lenguaje poético es el lenguaje más poderoso. Y tú lo usas con mucha creatividad. Un saludo. Luis

 

PD

 

A veves no es necesario buscarle el sentido. Si es que lo tiene
Un beso, Grace.

 

Muchas gracias, Gigio.
Un abrazo.