Escribo.

Y escribo en el mar lo que sonríen las olas,

y escribo en el corazón el canto de las espesuras,

y escribo en la ciudad los vientos hermanos,

el rostro de la Luna pescadora…


y en el interior, se escriben, los puentes íntimos, las cataratas negras…


y dibujan los templos por las frondosidades melódicas,

y los puentes por esos carteles de la llovizna…


y se reúnen los jardines en nuestras manos,

y por el acontecer de las cafeterías, bajo esos cúmulos del tacto…


y las inquietudes de los bosques que esperan al atardecer,

y para que nos bendigan el vientre de pan.

 

No tengo dudas, amigo mío, que tus manos son semillas de flores y hermosos jardines.
Gracias por compartir páginas tan inspiradoras para todos los que disfrutamos leyéndote.
Abrazos

 

Muchas gracias querida amiga Cecy, una gran alegría saludarte en esta mañana de domingo. Un abrazo, con el deseo de que tengas un feliz domingo y una estupenda semana!

 

Un gran verso frondoso y selvático, que no prescinde del humor, me gustó mucho, un abrazo tribuZen!!

 

Muchas gracias amigo Ben, es una gran alegría tu compañía y apreciaciones para estos versos. Un gran abrazo!

 

Muchas gracias por su compañía y sabias impresiones, querido Maestro Luzyabsenta. Un placer saludarle, con el deseo de que tengas una estupenda semana!

 

EXCELENTE!!! un poema que he disfrutado mucho estimado amigo,
besos de colores en la distancia