El loco (Diario de un loco)

Entre las mesas, los camareros
y los espejos,
bajo los globos de luz
se sienta el loco,
entre filas de taburetes
donde los bebedores de esperanza
dormitan un domingo.

Le cuenta al camarero,
confesor en horas extras,
que le persiguen erizos muertos
en noches de pesadillas negras.
Dice que de niño vio ángeles
entrar en su habitación
y le susurraron al oído
canciones de sirenas.

El loco camina la ciudad,
no sabe a dónde va.
Pasea y vuelve a pasear.
El horizonte es cambiante,
las fronteras de luces se enturbian.
Quién sabe,
quizás sólo él sabe la verdad.

 

Cada vez me identifico más con tu loco. El final me encantó. Un abrazo.

 

Me gustó mucho
Saludos

 

Egregio loco caminante sin destino que sabe que solo podrá anclar su andar cuando caiga la llovizna de cordura.
Alucinantes versos. Grata lectura.
Saludos Minona, que tenga un buena semana.

 

Más de alguien se identifica con tu poema.
Hermosas letras.
Un placer leerte

 

Gracias. Es genial que te identifiques con el loco. Un abrazo.

 

PERFECTO, un poema extraordinario, se le aprecia hoy en la cercanía
abrazos desde Coslada,

 

Excelente poema Minona. Me encanta cada uno de sus versos y el final es fabuloso. Un gran abrazo.

 

Gracias, es grato saber que gusta lo que uno transmite y escribe.

 

Gracias Daniel, no sé si algún día se mojará de lluvia de cordura. Me gusta así, tal cual, llevado por la locura. Un abrazo

 

Gracias, supongo que ese es el fin de la expresión artística, que el que observa o lee se identifique. Es un placer conseguirlo. Un abrazo

 

gracias, amiga poeta, no estás lejos de León. Feliz semana.

 

Gracias por tu comentario, un halago y placer saber que mis letras llegan. Un abrazo