Dedicado a internos de Hospitales Psiquiátricos

Sitio donde llegamos rotos y nos terminan de romper las injusticias
Un ángel soporta callado en una esquina la ausencia de sus alas

Pasillos inundados por derrotas
Paredes manchadas con sueños destruidos
Cuerpos inmóviles se deshacen en la densidad filosa de los días

Voces que se buscan entre sí
Gritos desnudos presencian el entierro de otra alma en el olvido

Rostros deshabitados deambulan por el patio
Pasos interminables en busca de una luz que disipe la miseria

Miradas desoladas anuncian el desamparo absoluto
El aire es testigo de otra inocencia perdida para siempre

Fantasmas hacen su hogar en los espejos
La noche baja como una avalancha de infiernos indecibles

 

sIENTES EL FRIO DE LA MUERTE¡?¡?¡?¡

 

Es más cálida que fría.

 

Estimado, es un poema descomunal. Felicidades por tu trabajo, muy sentido. También he creído ver esos fantasmas.

Un abrazo.