Amistad IV (El río de la amistad)

El río de la amistad


Tiene mi patria un río
con puentes hacia un verano
de soles interminables,
de luna sobre los álamos.

En sus orillas desata
sus gotas de fiel remanso,
es caudal de sensaciones
que alegran el día aciago.

A la vera de su curso,
entre caminos y jaros,
allí donde cae la tarde
se oyen risas como pájaros.

Sopla el viento de las ocho
con su ritual, fresco y mágico,
y en las ruinas del molino
se acurrucan los abrazos.

La noria de nuevo gira,
poco a poco, paso a paso,
emanando agua de historias
que acrecentan su legado.

El río no se detiene,
el río es jugoso tránsito,
el hoy en él es distinto
mas también igual que antaño:

Tiene mi patria un río
con puentes hacia el ocaso.



​

 

Maravilla de romance, musical y arrullador. Un placer leerte.

 

el verano, el ocaso.

es un gusto presenciar la riqueza léxica agasajadora de la que hacés uso, eva. sí, supongo que aquellas amistades que valen la pena, son un puente hacia el verano porque nos llevan a ese fuego del espíritu.

y también, puentes hacia el ocaso. porque las amistades de verdad lo son también en ese momento en el que rompe la noche.

te voy a contar que de chavalos, teníamos conversaciones de colegio - entre los amigos hombres, por supuesto- acerca de la existencia o no de la amistad entre hombres y mujeres. una tremenda pendejada: más allá de la carne y las hormonas, somos todos seres con esperanzas y miedos caminando a través del páramo, como lo hemos hecho durante los últimos cien mil años. arrimar el hombro juntos es parte indispensable de ese camino.

ha sido un gusto leerte, como es usual.

salud, eva.

 

Cuanta belleza agolpa esta gema poética que nos compartes querida Eva!!
Con un cierre que grandilocuencia la esencia del especial afecto y abraza su caudal de agua clara.
Prodigiosa tu pluma y el corazón que la timonea!!
Celebramos agradecidos tu entrega, que en Nuestro Espacio se erige con toda su luz.
Recibe un fuerte abrazo y mi admiración de siempre.
Camelia

 

Bonita metafora la de ese río donde la amistad mana y corre , y el puente que une en un abrazo
Un abrazo Carmen

 

Querida Isabel, en verdad partí de una experiencia real, el río ha formado y aún forma parte de muchos momentos cómplices en mi vida y quién mejor que él, que es simbología pura, para acercarlos y hacerlos extensibles. Por eso me siento muy afortunada y me alegra que te haya llegado esa sensación.
Para lo bueno y para lo malo, en continuo cambio y siempre ( aunque algunos hayan tomado otros cauces)
Un fuerte abrazo,
Eva

 

Gracias por tus palabras amables, querida Luciana. Un abrazo,
Eva

 

Charlie, como siempre dando en la diana, es un gusto recibir tus comentarios.

Pues sí, con el tiempo sabemos ir colocando las cosas. Por mi parte, siempre he tenido tantos amigos como amigas, hacíamos cuadrilla y pelotón pero es cierto que siempre andaban por el aire esas hormonas de las que hablas y que, por cierto, aumentaban la emoción. Tuve también amigos de gran confianza y ¡cómo los recuerdo!, fueron la garantía de eso que bien dices tú, y... si hablaban (aunque no todo el mundo)...¡pues que hablasen! En eso, qué bien que hemos crecido ¿verdad?

somos todos seres con esperanzas y miedos caminando a través del páramo, como lo hemos hecho durante los últimos cien mil años. arrimar el hombro juntos es parte indispensable de ese camino.
Tan cierto como hermoso.
Gracias, Charlie.
Un abrazo y salud.
Eva

 

Querida Camy, siempre dejas con tus comentarios una agradable sensación, y no es por casualidad, estás llena de esa virtud, muchas gracias por tu compañía.
Un abrazo fuerte con cariño y mi deseo de que todo vaya bien.
Eva

 

Aquí seguimos, querida Ligia, como el río, ¿quién lo para?
Muchas gracias por tus palabras y un fuerte abrazo.
Con cariño,
Eva

 

Muchas gracias, Carmen, un abrazo fuerte y animoso,
Eva

 

El río de la amistad que nace en la infancia y tiende puentes hacia el verano y el ocaso, ¡qué buena metáfora!
Y lo que nos transmite.....

En sus orillas desata
sus gotas de fiel remanso,
es caudal de sensaciones
que alegran el día aciago.
​

.... es tal cual, eso es la amistad.

Eva, qué gusto da leerte, chica, de verdad.
Un gran abrazo entre risas como pájaros
Javier

 

Me iba ya, ¿pero cómo no acudir a tu reclamo? El gusto de leerte es el mío, pena que me tengo que ir volando
Gracias por destacar esa estrofa y por ver a través de ella.
Un gran abrazo y muchas gracias, sobre todo, Javier, por dejarme con este buen sabor de boca
Eva

 

Muchas gracias, Maramin, por acercarte y dejar tus impresiones resaltando esos últimos versos.
Y si invitamos a ese delfín al río? Tengo entendido que crece con la pluralidad
Un abrazo,
Eva

 

Coplas, romance, que acercan orillas y se dejan llevar por el río.
Desde mi pequeño país de jaras y romeros, en que el refugio es todo lo circundante, aprecio en alta estima este viento que traes que tantos momentos guarda.
El final me dejó un poco perplejo; pero a decir verdad, todos los ríos llegan a ese mar que es el morir, como diría Jorge Manrique, pero los puentes son indispensables, para cruzarlos o no diría Benedetti. Ahí radica la verdadera amistad.
Un abrazote, Eva, y todo un placer leerte.

 

Hola, Alonso, así es, lo has dicho muy bien y bonito con esa mención a Benedetti.
Aquí "ocaso", aunque esté muy asociado, no es sinónimo de "muerte"; al contrario, es avance, es caminar la vida por puentes de amistad, desde el verano hasta el ocaso, evolucionando, construyendo, en los momentos mejores y sobre todo en los peores...Nos vamos haciendo mayores y el río, como la amistad, en su madurez no se detiene.
Muchas gracias, compañero, por tu comentario. Te dejo un abrazo y mi deseo de que hoy sople ese viento en tierras tuyas y extienda los aromas de su romero.
Eva