En Samos

Un sueño solitario cual asceta
duerme el sol en los claustros monacales,
y en esta tarde cárdena y violeta
sus luces son vidrieras celestiales.

Al contemplar en Samos la silueta
que coronan sus torres verticales
me acerco más a Dios y anacoreta
abandono mis bienes terrenales.

Quiero la soledad que en cautiverio
me hará llegar al cielo muy deprisa
como la luz ardiente de una llama.

Después y con la paz del monasterio
ya puedo ser amor o eterna brisa
o ese ciprés que en alto se encarama.

PepeSori
SafeCreative
Abril2022
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Quiero decirte, Pepe, con la solemnidad religiosa que me caracteriza, que cuando me invites, prefiero que sea en una venta, el monasterio es precioso, pero me da a mí que se come bien poco.
De tu soneto qué decir, tocaste techo hace mucho, y ahora lo haces más difícil, que es mantener el nivel.
Te felicito por él, y por estar haciendo lo que verdaderamente te gusta, aparte de salir en los periódicos.

Aaabrazos.

 

Quiero decirte, Pepe, con la solemnidad religiosa que me caracteriza, que cuando me invites, prefiero que sea en una venta, el monasterio es precioso, pero me da a mí que se come bien poco.
De tu soneto qué decir, tocaste techo hace mucho, y ahora lo haces más difícil, que es mantener el nivel.
Te felicito por él, y por estar haciendo lo que verdaderamente te gusta, aparte de salir en los periódicos.

Aaabrazos.

Gracias Manuel por tu comentario y visita, ya ves, hasta a mi me parece un buen soneto, jajaja y solo tú lo has comentado lo que me satisface tanto como la inmensidad de este monasterio del cual te equivocas en algo muy relevante: la señora Puri o como la llaman los monjes Doña Pura es una señora de las de antes, cocinera de recursos, cocinera de pro, cocinera de altos vuelos tradicionales y la comida es excepcional y abundante y dado que los monjes son Benedictinos ( "Ora et Labora") la huerta del monasterio aprovisiona a la cocina del monasterio de las mejores hortalizas y verduras, los huevos con esa denominación de origen de: "puestos en tierra por gallinas en libertad", la carne de los animales que se crían en el interior de monasterio, .....etc etc...y mucho mejor que el Comportillo es el vino Ribeiro o Albariño, para acabar también y rimando con albariño
un abrazo con cariño,
Pepe

 

Te leí y no comenté porque pensé que estabas de visita allí o algo, y bueno no sé, no me parecía comentable, (soy un burro) pero venga, no me digas que vives allí, vamos ya, que chulo. Yo, durante un tiempo quise ser monje jajaja, mi madre fue cocinera muchos años de una parroquia franciscana de barrio, bastante comprometida con los vecinos, aunque yo soñaba más con eso que tú estás haciendo, un retiro espiritual.
Saludos.
Y el soneto que decir, es que,. Yo no escribo así, pero técnicamente pues genial.

Muchas gracias por dejar tu comentario y pasar a leer.
No, no vivo en el monasterio, ni tampoco estoy de retiro espiritual, es más sencillo, colaboro con dos ong´s cada año dedicadas a dar amparo, soporte y ayuda a los peregrinos en el Camino de Santiago, y mi compromiso con ellas es pasar dos o tres períodos de mi tiempo libre en los albergues que el Camino dispone para dar alojamiento, desayuno y cena a los peregrinos de todo el mundo que van camino de Santiago y sin coste, solo donativo, y en este caso me mandaron a este monasterio de Samos que es una joya del siglo VI.
Con respecto a lo que dices: "yo no escribo así" no sé lo que quieres decirme con ello, pero no es relevante entiendo, y agradezco que el soneto te parezca genial.
Un abrazo
Pepe

 

Jaja José no, no tengo la piel fina jaja pero tampoco ofendes en nada amigo, afortunadamente la poesía y su diversidad es lo que la engrandece.
En cuestión de estilos puedes ver, si te interesa, que en mi blog hay de todo.
Me gusta tu sentido de ver las cosas,o por lo menos en lo que algunos comentarios dejas entrever.
Un abrazo

 

Gracias Luis, el asunto de la partida de cartas estaría muy bien, pero el caso es que no estoy de huésped, estoy de voluntario en el albergue de peregrinos que ocupa una parte de la planta baja del monasterio y estoy solo, cierto es que me relaciono esporádicamente con el pprior.
Hago vida en una celda de los monjes para dormir, las comidas las recojo en el torno, y doña Pura es escandalosamente generosa con sus platos.
Lo cierto es que aquí se siente uno a pesar del cansancio, muy relajado.
Gracias por tu paso y por el comentario que me has dejado
Un abrazo
Pepe.

 

Estimado Pepe, se nota que todo ese ambiente que te rodea eleva tu poesía, y como bien dices en tu último terceto:

Después y con la paz del monasterio
ya puedo ser amor o eterna brisa
o ese ciprés que en alto se encarama.

Gracias por compartirnos tu arte Pepe, un placer de lectura que nos adentra en el mundo de los silencio monacales y el la belleza del paisaje y lo más importante nos habla de esa oportunidad de estar a solas con nosotros mismos.
Un abrazo
Isabel

Muchas gracias Isabel y disculpa mi tardanza, estuve dos meses fuera, se rompió el ordenador, sigo con muchos muchos problemas para editar, responder y comentar en la página.
Dicho esto te doy toda la razón en que la soledad del monasterio facilita la introspección, la paz interior y a veces hasta la llegada de nuevas musas,
te mando mis saludos y abrazos más cordiales,
Pepe.