Las preguntas de un medio corazón

(…) Daba igual dónde estuviera: podía estar en América o en Oriente,
tú llamabas, tú llamabas a tu hijo siempre
porque yo era Dios para ti, un Dios fuera de la ley,
poderoso y sagrado, lo único real y suficiente,
siempre tu hijo fuera de todo orden, siempre reinando,
porque todo cuanto yo hacía recibió tu larga aprobación
cuya moralidad no es de este mundo.

Extracto del poema «974310439» de Manuel Vilas.
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LAS PREGUNTAS DE UN MEDIO CORAZÓN

Somos migas de luz aquí y ahora.
Nos quedan, hijo mío, muchas tardes.
Descósete en el tiempo y no lo guardes:
el instante sucede sin demora…

Madre, cuando te exilies de tu aurora
te buscaré en los vértices cobardes
de la jodida vida mientras ardes
en esa luz azul que me devora…

¿Cómo sobrevivirte entretejida
en el dolor de una memoria inerte?
¿Cómo aguantar la madrugada herida?

¿Qué significa no volver a verte?
¿Con quién departiré sobre la vida
si a mi otro yo se lo llevó la muerte?

Kalkbadan
Madrid, 22 de abril de 2022

 

Los dos tercetos son realmente intensos, conmovedores. Un gusto leerte.

 

Tu madre sigue muy presente.
Un abrazo, Kalkbadan.

 

¡Hola, Luciana! Muchísimas gracias por pasar por estos versos.
¿Cómo hacer frente al tremendo vacío que nos dejan los seres queridos que se nos marchan?
Evoco en estos versos lo duro que me será afrontar la ausencia de mi madre y compañera.
Y eso que ya tenemos todos a una cierta edad la vitrina del desencanto bastante llena, pero en esto de la muerte no se adquiere mucha experiencia a pesar de coleccionar ausencias.
Un gusto tu paso. Saludos.

 

¡Hola, mi querida Isabel! Me alegro de que te hayan gustado. Desde luego es una temática universal...
Como te decía, los versos los escribí después de una conversación que mantuve con mi madre en la que me comentaba que en el móvil guarda los poemas que le he ido enviando durante tantos años. Y recordé aquellos versos Manuel Vilas con que encabezo el poema y que me marcaron profundamente. ¿Cómo sobrellevar la ausencia de los seres queridos? Hay heridas que el tiempo no cura, se infectan de porqués y se agravan. Y por otro lado, qué impacto existencial provocan ciertos objetos... Y en este sentido al móvil lo considero de proverbial trascendencia; cómo será ese primer amago de llamar y darte cuenta...
Pretendía darle una naturaleza dialogada a los cuartetos, pero claramente me quedaron dialécticamente evocativos.
Creo que el tiempo verbal del octavo verso ayuda a ello, pero es que sufro y sufriré -como muchos- por el síndrome del "palíndromo humano". Esa tendencia de volver la vista atrás y nutrirte de los recuerdos que no son más que memoria inerte, olvidándote de vivir aquí y ahora.
Somos migas de luz, un rayito de aurora en una ventana temporal que dura lo que dura un chasquido de dedos.
Y todo esto lo sabes muy bien.
Un abrazo enorme, amiga. Y gracias.

Andreas

 

Muchas gracias, Sergio, por tu siempre presencia en mis versos.
Un abrazo, compañero.

 

Así es, querido Andreas: el precio de esa relación tan especial que tienes con tu madre lo pagarás en dolor. Este soneto me ha recordado mucho a mi hermano, su transfiguración ante la muerte de mi madre. Se puede gozar de la propia sensibilidad, pero se paga un precio: los avatares de la vida y de la muerte nos hieren más hondo que a aquellos que recorren el camino sin comprometerse.
En fin, un hermoso y doloroso soneto.
abrazo
Jorge

 

¡Querido, Jorge! Dolor, llegará inevitablemente el dolor, pero como bien dices es el precio que uno debe pagar por entretejer la amistad en la esencia del amor maternal.
Releyendo ahora los versos me di cuenta de que en el último de ellos me había comido la preposición "a" que debe acompañar al CD. Corregido queda.
Un abrazo, amigo, y gracias por pasar.

Andreas

 

Como ya te he dicho muchas veces, Isabel: gracias por la ternura.
Un abrazo enorme y feliz semana.

 

Quedó mejor con la preposición, Andreas. De la otra forma, cosificabas a tu otro yo, pero no diría que fuera incorrecto.

abrazo
J.

 

¡Hola, Jorge! Quizá no sea incorrecto, pero encuentro difícil que ese "Yo" (tan potente) no funcione como complemento de persona.
Un abrazote y muy buena semana, amigo.

 

Sin palabras me has dejado, es así, tal cual....

¿Qué significa no volver a verte?
¿Con quién departiré sobre la vida
si a mi otro yo se lo llevó la muerte?
​

... es ese un paso para el nunca estamos preparados por mucho que nos preparemos.

El único consuelo para aguantar esas madrugadas heridas es sentir, como es mi caso, que te sigue acompañando.
Magnífico poema a mi entender, Andreas, te felicito y aplaudo.
Un fuerte abrazo.
Javier.

 

¡Querido Javier! Muchísimas gracias por dejar tu inestimable huella en este poema tan importante para mí.
Un abrazo grande, amigo.

 

Un temas muy triste; bello soneto amigo