Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

Las hojas arranca
del cedro el chaval
y cual arma blanca
las hiende y desbanca
irreal rival.
​

 

La "vesión oficial" indica que el de cierre es de siete, amigo Cirhian. Te apunto ese "Los hojas..."

La clepsidra es el rival,
con su insistente goteo,
que en confrontar titubeo.
¿Qué grotesco manantial
alimenta ese conteo?​

 

Puede haber aires mejores
que mezan otros cabellos
y nos muestren esos cuellos
más lindos y seductores.
Yo los prefiero sin vellos.​

 

Encontrar hombres con vellos
se ha convertido en problema
pues todos se ven más bellos
y evitan cualquier edema
si se afeitan los cabellos

 

Siempre faltan los cabellos
en la testa, por el frío
y cubrirla en el estío
del sol de ardientes destellos.
El raparse causa lío.

 

Afeitarse no es un lío
si sabes llevar la barba
con estilo y señorío;
la llevo fina y no escarba
ningún ácaro bravío

 

Este corrido es bravío
que a la feria de las flores
llegó con ansia de amores
un valiente tapatío
aunque tuvieran señores.

 

Te haremos, como señores,
despedida de soltero
sin las jóvenes en cuero
que reclaman detractores.
Tienes un suegro severo.​

 

En las tardes, asevero,
es grato escribir poemas,
unos de tema severo,
aquellos para el te quiero,
otros en los que blasfemas.

​

 

Vituperas y blasfemas
y descontrolado a diario.
Hay que ver qué presidiario
va a soportar tantas flemas,
que tu estrés es tan palmario.

 

Con mi proceder palmario,
digno de un prócer de antaño,
con el vulgo me enmaraño
como debe el funcionario.
Lo que importa es el escaño.​

 

Me encaramo en el escaño
porque le gusta al bebé
si le digo ñe ñe ñe
aún le falta para el año
estoy clueco y lo sé

 

Es de siete y lo sé,
de nueve el anterior.
No es que sea mejor:
simplemente conté
con el ordenador.​

 

Cosas del ordenador
que ofrece todo su apoyo,
si algunos versos enjoyo
y me ayuda el contador
algo en cierta forma boyo.

Boyo* mantenerse a flote.

 

Como un barquichuelo boyo,
gracias a tu compañía,
muy lejos de la sequía
que me tenía en un hoyo.
¡Adiós a la soltería!​

 

Los días son pendulares
aquí y en la Conchichina
por mucho que uno maquina
hay buenos y regulares
¡y ojo la que se avecina!

 

Tormenta que se avecina
atormenta a una vecina.
Por cada acción, reacción
verás, estando en la China
o en la altura de un avión.​

 

En esta historia el abuelo
debo decir que es prudente;
tanto loucost, yo me huelo
que viviremos el duelo
de revisión deficiente.

 

En eso de deficiente
y que le guste volar,
por dignidad no ha lugar
nombrar lo que es evidente
…es ya cosa de esperar…

 

Me estás haciendo esperar
hasta el treinta de febrero,
y no hay amor verdadero
que el tema pueda aguantar.
Estaré en el parrillero.​

 

Espera en el parrillero
espera que llegará
tu novia y el del tercero
y al verte te sonreirá
y se quitará el sombrero

 

Ermenegildo tienes un error en el primer verso.

Me gusta usar el sombrero
me da un aire de elegancia
pero dicen que exagero
porque no se usa en enero
que es tan solo petulancia.​

 

Yo no sé si es petulancia
cubrir la calva en invierno
pero si el frio es eterno
como ocurre al sur de Francia
es mejor lucir moderno.

 

Siempre es bueno ser moderno
y respetando la edad,
el resto es frivolidad
sea en Francia, en el averno
o en toda la cristiandad.

 

Gracias. Tengo el autocorrector en inglés en el MSWord, de donde suelo importar lo que escribo. "Hacienda", como tantas otras palabras que se han tomado prestadas de tu tierra, figura en inglés. ¡Arreglado!

 

Esto de la cristiandad
me suena a muchos adeptos
que siguen claros conceptos
de honradez y de bondad
transformados en preceptos.