Agonía (Soneto Cautivo)

Las aguas están quietas.
Espejo de mi espíritu sagrado
porque siempre decide el esperado
sendero que lustroso va en cartas indiscretas...

He visto desde el llano, ocultas y secretas
marcas que del guijarro se ha encontrado.
Hombres junto a la arena lo han marcado,
colocado etiquetas.

Es parte del tablero que me atrapa.
Célula perfecta de otro mundo no soñado
que brilla entre la azul cosmogonía.

No me desangraré hasta hallarte aunque se agazapa
en todos los minutos lo he esperado,
detrás de mis ensueños, maltratada agonía.

Amalia Lateano

Es una variante polimétrica del soneto, creada en el 2008 por el poeta peruano Juan José Cautivo.
Su fórmula esquemática coincide con la del soneto clásico (ABBA–ABBA–CDC–DCD), pero la medida de sus versos componentes es la siguiente:
7–11–11–14
14–11–11–7, para los cuartetos.

11–14–11, 14–11–14 o bien
7–11–14, 14–11–7, para los tercetos.

 

Excelente estructura, saludos querida poetisa,

 

Querida amiga!

La realidad nos permite y nos provoca soñar y los sueños se realizan… que es lo primero?

Tal vez soñar? O son todos peldaños para ascender...

Besos agradecidos

 

Amalia, tu poema tiene una atmósfera de misterio y melancolía que cautiva desde el primer verso. La metáfora de las aguas quietas como "espejo de mi espíritu sagrado" es poderosa, pues refleja esa quietud que a veces experimentamos en nuestro interior cuando el alma está en contemplación o en espera. Ese contraste entre la calma superficial y la agitación interna está muy bien logrado.

"He visto desde el llano, ocultas y secretas
marcas que del guijarro se ha encontrado.
Hombres junto a la arena lo han marcado,
colocado etiquetas."

Me parece fascinante la manera en que introduces el tema de las marcas, etiquetas, y lo que se "ha encontrado", casi como si los recuerdos, las experiencias o incluso la identidad estuvieran siendo trazados y clasificados por otros, mientras la esencia del ser sigue intacta y callada, esperando.

La estructura polimétrica que usas le otorga una musicalidad particular a tu poema, con esos versos de medida variable que refuerzan la sensación de un viaje que, aunque parece lineal, es en realidad un proceso de constante cambio y movimiento. La fórmula parece tan fluida y orgánica como los pensamientos y emociones que describes.

El final es inquietante, pero también lleno de una especie de determinación callada, como si no importa lo que cueste, el hallazgo de algo o alguien es inevitable, incluso si está "agazapado". El conflicto interno que atraviesa el poema —la búsqueda, la esperanza, la angustia— se siente muy auténtico.

Es una obra muy profunda que invita a la reflexión sobre el deseo, el sufrimiento y la paciencia, todo con una belleza lírica muy particular. Un gusto leerte.




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