¡Qué importa nada, volviste!

... La pérdida de un amor ¡te derrumba! No comes, no bebes, no miras, no eres,... la tristeza lo desvanece todo al gris y tus días son gotas que brotan de tus ojos una tras otra. Temes a la noche pues ella de nuevo vendrá para ser tu pesadilla ¡y trae sus ojos, su boca, su desnudez sintiendo su calor al frío quejumbroso de tu fiebre en el delirio que te castiga por el pecado de adorar al amor más grande de tu vida! ...Pero cuando, felizmente, ella vuelve, ¡revives y le das gracias al cielo pues tus súplicas fueron al fin escuchadas, y tu amor regresa y ese llanto se hace dicha que florece de aquellas lágrimas que sembraste! Luego, ¡ya nada quieres más que volver a ser feliz, Feliz, FELIZ, solamente, feliz!

Anthua62
México 31-03-24

 

Sin duda, decir que te quieres morir no es mentira, te desangras sin sangrar, te ahogas por dentro, no pasa el tiempo y eres estaca inamovible en tu mismo lugar, y esperas, ¡ah cómo esperas! Y luego del trabajo recibes la llamada, "¡perdón tengo fiebre!", cuelgas y qué más da: ¡es verdad, estás enfermo, enfermo de amar! Otro abrazo desde toda esta alegría por saludarte, un placer ...

Anthua62