Melancolía

Dedicado​

MELANCOLÍA

Salvemos del olvido aquellas fotos,
busquemos en sus blancos la belleza
y en sus negros la luz de quien empieza
sembrando flores en los terremotos.

Que el gris notario de los platos rotos
no venga con lecciones de certeza;
¡seamos ese ateo que le reza
al culto libre de un amor sin votos! (*)

Esta fruta de sangre melancólica
necesita tus labios de marfil
y el manantial de tu mirada eólica.

Qué decirte...; escondamos ya el fusil
y que tu primavera metabólica
nos salve del cajón el mes de abril.

Kalkbadan
Madrid, 4 de abril de 2024

Las imágenes "fruta de sangre" y, como no, ese "mes de abril" en el cajón,
las tomé prestadas de canciones que ya todos conocéis del maestro Joaquín Sabina.

(*) No sería rima consonante, pero yo creo que el Sabina se decantaría más por esta alternativa que la planteada por mí :

(...) al culto libre de un amor sin bótox!

 

Es increíble como cada uno logra aplicar la melancolía a su justa medida.
Un abrazo, Kalkbadan.

 

Es un bello soneto petrarquista con cuartetos de versos mayormente heroicos y tercetos polirrítmicos jugando con rimas agudas y esdrújulas.

Un gran trabajo que nos has compartido.

 

Hermoso soneto convocando a la paz. Un placer leerte.

 

Muchas gracias por pasar a leer, Alde.
¡Saludos!

 

Interesante lo que comentas, Sergio. Sí, la melancolía resulta ser más subjetiva de lo que pensaba. Así como la tristeza -al igual que la felicidad- me da la impresión que nace de muy dentro y se expande hacia afuera, la melancolía se deposita dentro pero proviene de afuera. ¿Y de dónde? Pues yo creo que proviene aquel multiverso evocativo de lo que pudo ser y nunca fue. Para mí la melancolía es el resultado anímico, por así decirlo, de la no solución.
¡Gracias por pasar! Un abrazo fuerte, compañero.

 

Me alegro de que te guste, Dragón. Gracias por leer.
Saludos.

 

¡Gracias, Luciana, por pasar! Sí, las reconciliaciones son necesarias. Nos solo de guerra vive el hombre.
Saludos, compañera.

 

Me alegra mucho que te haya gustado este puñado de versos, Iguazú.
¡Saludos!

 

¡Querida Isabel! Muchísimas gracias por pasar por este puñado de versos Sabinianos.
Ese cuarteto que citas también es mi predilecto.
Qué amplísimo espectro tiene la melancolía, ¿verdad?
Un abrazo fuerte amiga, y que te sea muy dichosa la primavera.