Vuela libre

Sara cerró los ojos y suspiró,
sintiendo una esencia de jazmín
que a todos sus sentidos recorrió,
recordando su infancia en el jardín.

De nuevo allí estaba jugando
entre sus orquídeas y amapolas,
dibujando círculos y volando
mientras escuchaba la gramola.

Su imaginación se desataba,
momento de sentir las emociones,
viviendo las historias ya pasadas,
recuerdos que se quedan en visiones.

Su vida resumida en un instante,
dejando un legado de ternura,
pasión, sonrisas, sueños y talante,
que tras triste final aún perduran.

Y aunque su cuerpo se desvanezca
su espíritu eterno se cura,
mientras quede jazmín que florezca,
su historia permanecerá segura.

Xute89

 

Me alegra que te guste, gracias a ti por compartir tu opinión. Un saludo.

 

buen poema...saludos

 

Hay quienes nunca se van completamente. Un saludo, Xute.

 

Muchas gracias amigo, un saludo.

 

Siempre es bueno ser recordado, y mientras estoy ocurra, nadie se va del todo como bien dices. Un saludo