Sobre las base de un prelude

Añeja las pestañas que cubren los ojos

Es difícil escribir sobre tu figura amarilla

Sobre el ojo de la araña que enceguece todo

Añejo aroma del mar al descorchar el Sol

Añejo el aroma de un sueño que vaga en un pañuelo

Es el tiempo un árbol

Y mi tiempo la rama más débil

Nimiedades de amor que solo sostiene el papel

Crepúsculo de tinta donde puedo caminar

Y tal vez encontrarte.

Sostén de sitio de plegarias

Beber tus formas irrepetibles: a veces alta

a veces blanca a veces negra delgada

obesa o incompleta

O estás a veces en todos los etcéteras


no importa...

Solo beberte

Y

Quiero caer en tu laberinto

En tu brazo de miles de madres

En la huella ineluctable de tu sombra que dejó un feérico sello

Una muestra de cómo caer sin dañar al amor

Caer

Solo en aquellos días que se pueden ver

en el espejo

esos encuentros de fruta donde se guarda

dentro el suspiro de tu atmósfera

El beso

Y donde vivo mejor.

El olvido imperfecto de ser humano

Solo estar

Clavado como un cristo

Con los rezos hacia ti.

 

Saludos Alde.