Incógnita

Enjaular la brisa como frágil ave,
es al más osado volverlo sumiso,
ser dueño del mundo y entregar la llave,
y dejar el alba, sola, en decomiso.

¿Quién, sí está en el cielo, baja al precipicio?,
Uno mismo busca a la mala suerte,
el amor un loco, en su sano juicio,
dándonos la vida nos condena a muerte.

Cultivas la flor y luego la talas,
callas el suspiro del último arpegio,
¿Pretendes al viento cortarle las alas?

Del silencio, el eco, roto el sortilegio,
víctimas los dos de certeras balas,
¡No otorga la vida, doble privilegio!
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muchas gracias estimado poeta Alde, por visitar mi rincón de letras, te dejo mis saludos cordiales ;P

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Muchas gracias estimado poeta Maramin, por dejarme la huellita, de su bonita presencia, le dejo mis saludos cordiales

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