Soñándote...

Desde este pozo al ras del suelo
donde los días se me clavan
grises, absurdos, filosos,
sueño que me estirás una mano
(con las uñas pintadas).

Me sonreís
con esos ojos que guardan
un cielo en calma.
Y realizás un gesto simpático,
una mueca, un paraíso.

Te veo llegar...
y resumís en vos
una flor y su sombra,
una merienda de leche y miel,
una caricia,
una venda para los veranos
que me sangran todavía...

De alguna forma
sos la parte llena
del vaso medio vacío
que somos los dos.

Quisiera seguir soñándote
(cuando lo hago no dejo de sonreir).
Sería bueno, entonces,
dejarme una sucursal de tu recuerdo
en estas letras...

y aunque ahora me vaya a dormir
seguiría soñándote a lo lejos,
soñando tus labios, tus pestañas,

soñándote llegar
desde este pozo al ras del suelo
donde los días se me clavan
grises, absurdos, filosos...

 

Wow, hermosisimas letras,
Creo ke nunka te habia leido,
Este poema es bellisimo
Besos

 

Si, me leiste, pero te olvidaste (y con razón). Gracias por las palabras.

 

Precioso, muy sentido.
Imaginé toda la escena amigo mío, incluyendo a la chica de uñas pintadas que te tiende la mano y te saca.
¡Saludos!

Silencio Mortal.