Perdona, me salté tu mirada

Perdona, me salté tu mirada y choqué con tus caderas.
No me mires así, fue un accidente de impulsos,
un desliz de mis ojos, una fractura en mis deseos.

Déjame bucear en el azul de tus ojos
sostener la respiración para resistir
más tiempo dentro de ti.
Deja que mis labios perforen tu pecho,
para que botes toda esa presión de miedo.


Arquímides Guillén
salvadoreño

 

Poeta es la primera vez que te leo y siendo asi dejo una cordial bienvenida a esta familia virtual.

Abrazos desde mi mundo con estrellas,

 

gracias Guadalupe, agradezco tu gesto y hospitalidad.

 

Bello, muy lindos versos, nuevamente me encuentro con una proa poderosa una joya a mí gusto de ladrón.
Nada, un gusto leerte y no te preocupes ya tengo novio.jajaja, broma. Amo las guitarras y las mujeres que tienen dentro.
Saludos amigo.

 

Esos choques no duelen, sino que apasionan, son mis preferidos.
Abrazos.