Cayendo en mi corazon.

Como es que mi mente no deja de pensar en ti
ni un solo bendito momento.
Estas con cada respiro, que empiezo a creer
que mi vida eres tú.

Te extraño ¡Maldita sea mi vida!
Que no te puedo borrar de ella.
Lo que ocurre princesa mía, es que estas
tan plantada en mi vida que sacarte de ella
seria matarme.

Cada noche pienso mas, y mas en ti, nada que
hacer en todo el día que estar tirado en el piso,
mirando al estupido televisor, y pensar en ti,
con cada rostro, con cada película que en mis
ojos divagan a diario.

A cada noche, el vino, el alcohol que recorre
mis venas intenta alejarme de ti, pero sucede lo
inesperado, mis dedos buscan tu voz, en tus
labios, con cada foto que mis ojos atesoran,
con cada caricia que mi alma abandonada
a su suerte espera.

Lejos de toda caricia humana, más solo me siento,
ni siquiera el abrazo de una madre me esta concedido.
Extraño los abrazos de tu voz princesa.
Hoy es el día que mi alma se quiebra y maldice todo.
Todo sea por estar junto a ti, ya no quiero vivir sin ti,
estrella, princesa mía.

Puedo hablar con mil mujeres, que todas ellas me
recuerdan a ti, cada palabra es para decir lo mucho
que mi alma, mi corazón, mi ser completo
te extraña.
¿Dónde estas corazón?
Como quisiera saber de ti.

Sabes, no estoy muerto, tan solo dormido en una
pesadilla que se hizo realidad, solo espero que
me despierte y esperar a las 10 p.m. y escuchar
el teléfono sonar, levantar el tuvo y escuchar
tu voz.

 

Un amor que acapara las 24 horas del , que no te deja respirar, pero si te permite amar aunque sea en los sueños de cada día. Un abrazo amigo.

 

A veces el amor es tan atrapante que uno no sabe si vive por el amor, o el amor lo hace vivir a uno...

Gracias por tu comentario, abrazos Galvarino