Una taza de café

Me tomo la vida con calma,
como este café que humea
mas allá de mi nariz.

También hubo un tiempo
en que era adicto a tu perfume.
no hablo de colonias baratas,
ni de fragancias francesas,
hablo de tu piel,
olía como a fracaso,
como a caos,
como a mentira de niño.

También sabías distinta
al resto de las mujeres,
como a cumpleaños feliz,
o como a aquel acantilado de la postal
con tus letras al dorso,
palabras suícidas como yo.

También esta taza caliente,
la de los corazones rojos
te echa de menos
y mi lengua se hace nudos
para no perder aquello
que me supo a ti
hace ya algún tiempo.

Hace ya algún tiempo
también el café me sabía mejor,
contigo pertenciendo a los paisajes
y el humo de tu cigarro
abrazándose a mi cuello,
apretando suave
como perdonándome el suspiro.

Debí dejarme algo en el camino
aparte de ti
y ahora solo soy
una taza de café
a la que le falta el azúcar.

 

Muy bueno pecado. Una sana costumbre venir a leerte.
Un abrazo.
Christian.

 

Una taza de cafe nuestra compañera en esos recuerdos eternos. Amigo se que la azucar en su momento endulzará tu cafe.
cuidate, con cariño, Anamar.

 

muy bueno pecado.el final, siendo tu la taza a la que le falta el azucar, es muy bueno...con estos poemas te convertiras en azucar y la taza en recuerdos...muy bueno, repito

 

triste.. cierto... pero como siempre. genial.

pd. cuidado con la cafeina

 

Quien sabia que una taza de cafe podia ser tan profunda? Tan triste tu poema. Gracias por compartiendolo con nosotros.

 

Agradezco de veras tu asiduidad a mis versos Cristian.

Gracias Anamar un abrazo.

Bellísimas letras Loida gracias, abrazos.

Gracias poeta a los 50 a ver si me dices tu nombre que es mas cercano que tu apodo, un saludo y un abrazo.

Hay drogas peores Lazaro, un abrazo.

Gracias a ti Arana por la huella y tu tiempo, un abrazo.

 

precisamente lo de poeta a los 50 viene por nuestro queridisimo bukowski. por eso de que a los 50 dejo de currar de cartero para dedicarse a la escritura...me llamo jaime, pero la peña me llama jaume por esto del catalan...lo cierto es que a mi me gusta mas jaume.suena mejor...abrazos compañero...

 

La segunda estrofa es muy romántica, y halagadora para la musa que provoco ese versar, pero luego la matas con el - debí dejar algo en el camino aparte de ti. Confiamos demasiado cuando tenemos una sonrisa en la cara, pensamos que esta no se convertirá en desconsuelo pronto, pero creo que desconfiar es la mejor manera de protegernos, ya sea de la melancolía que causa el fin de lo efímero o de nosotros mismos....triste poema. Ojala aprendas a amar el café negro.

 

Bueno yo soy de los que sonríen poco y normalmente solo tengo una mueca, el café negro no es lo mío, así que mejor esperar el azucar, abrazos.

 

Gracias hada, un abrazo.

 

UNA TAZA DE CAFE,MIL Y UN HISTORIAS,UN GUSTO LEERTE EN ESTA COMPOSICION,QUE EL MELAO DE SU RECUERDO ENDULZE TU VIDA Y NO SOLO EL CAFE,AUNQ HE confesar que yo no endulzo el cafe,en fin
un placer pasar por aqui

 

Bueno seguro que si que lo pones dulce, no digas eso, un abrazo y gracias por tu tiempo.

 

Nostalgia, melancolía y trizteza, emociones que me llevan, con tu poema ,a descubrir que , a vece somos eso.. una taza de café sin azúcar... Poeta.. mis respetos....

 

Si ademas me encanta el café pero sin azucar..... como que no, por eso no me lamo a mi mismo, un abrazo armonia, placer que pasaras.

 

La vida tiene vueltas impensables....Tu poema me ha gustado...Estuvo como mi limonada sin azucar ...hace tiempo atrás...Un placer leerte... Camelia

 

Lo se espero que la noria se detenga en el sitio apropiado, saludos camy, gracias por pasar.

 

muy bueno pecado...te noto mas suave ultimamente, mas pausado, mas melancolico, y me gusta, te sienta bien, le sienta bien a tus letras; pero da igual, como sea, sigues siendo un gran poeta

la segunda y la ultima estrofa me gustan en especial

un besazo
isa

 

Me gusto mucho eso de el olor de ella, el sabor de ella. Me deleité con la dulzura que sale de tí para ella.

 

es excelente tu poema, muchas felicidades.

 

Me encanta verte por aquí Isabel, un abrazo.

 

Gracias ERA Y Francisco por pasar haciendo presencia, saludos.