Envenenada a la luz de la luna

¡Ay dolor que te haces veneno!
tus cuchillas afiladas me destrozan
eres un vino amargo que me ahoga
un viento eterno que me apaga

¡Ay espina que me adormeces!
tormento que me ciega y domina
un miedo que en mi pecho se anida
una voz que a todas luces me maltrata

Y lidiar con ese dolor me mata
la noche es un suplicio adormecido,
cuando despierto la soledad me atrapa
con el mismo sufrimiento de testigo

¡Ay este llanto húmedo y oscuro!
esas lágrimas que mi cuerpo bañan
son todas de líquido cristal ardiente
que me quema de a poco las entrañas

¡Ay cuando acabará esta pena!
cuando será ese memorable día
que me visite la dicha y la alegría
al compás de una luna enamorada.

 

Las heridas punzantes las sana un buen poema como el tuyo, saludes.

 

Precioso poema aún en el dolor que define.

Un gusto detenerme en tus letras.

 

Mariela... nuevamente gracias por tus lindas e inspiradoras palabras.... besos... :::hug:::

 

gracias por este poema
muchas felicidades me encanto.

 

Tu melancolia hasta el alma me cruzo y bueno te corregi el ayy solo eso y bueno es bello tu poema una melancolia profunda pero grata para leer y que placer estar por aca de nuevo besos linda y animo.

 

El dolor pareciera ser eterno.
El sufrimiento pareciera no acabar.
La alegría pareciera no llegar.

Bonito poema !!!

Un abrazo desde mi pecera...

 

Nuevamente gracias por tus lindas palabras... un gusto encontrar la refrescante humedad de tus letras. ​

 

Gracias por las felicitaciones...

 

Vaya amiga qué buen poema!!! qué manera bella de describir la pena, el dolor y esos sentimientos que angustian tu alma. Un gusto enorme leerte. Besos y estrellas

Denn

 

Estimada Denn: Espero que te encuentres bien... gracias por tu comentario... muchas gracias de verdad. Saludes :::hug:::

 

Gracias por tus letras.