Yo te despedí

Tengo una tristeza
que no puedo evitar.

La selección del mundo que abruma
con sus sortilegios desvanecidos.

Y en medio de ello tú estás allí

tan fría e indiferente hacia el universo.

No hay importancia alguna
que te mueva
ni nada que halla tenido
tal vez el motivo para estremecerte.

Y sigue tu piel tan fría,

a pesar de mis palabras.

Tú no te mueves

a pesar de mis besos y abrazos,

a pesar de mis lágrimas de dolor

que ni siquiera viste caer

cuando en la tumba

yo te despedí.
​

 

Sentidos versos, de una tristeza flotante. Agradable forma.

Saludos y abrazos

Andrés Amendizábal​

 

Me ha gustado este poema
Triste, impactante, pero un placer leerlo
Te envio mis aplausos y un abrazo
Joan