Estás Dormida

Estás dormida en la mañana cierta
y sutil como el agua del océano.

Con la boca siempre dulce y roja,
con el puerto entreabierto de tus manos.

Se te inundan en la noche de siempre
las sentinas de todos tus naufragios.

Y sales de la mar henchida en besos
al campo azul de aquellos mis quebrantos.

Ah diosa del amor y la substancia
espiga de mis noches y mi faro.

Me regalas las voces de tu entraña
sin enunciar de tus labios ni un reclamo.

Me tiendes los aromas de tus besos,
me acunas con pudor siempre en tus brazos.

Amiga de mis horas de nostalgia,
dorada flor de tiempos tan mundanos.

En tus tiestos te duermes para siempre
y brillas como el sol que tanto amo.

 

ELISALLE:

Aunque tardiamente, agradezco tus amables letras.
Tu comentario es breve pero muy lisonjero. Se ve a leguas
que te gusta la poesía y además tienes conocimientos
técnicos. Te abrazo afectuosamente:

J u l i o .

 

Mi estimado Julio, tus imágenes forman metáforas gratas, suaves y elegantes que son de mi completo agrado, aún cuando interpretas la nota de la muerte.

Un placer haberte leído.

Besos

 

Sor Galim:

Recibo con enorme alegría vuestras letras, pues además de contener
comentarios muy favorables a mi poesía, se originan en Venezuela, linda
tierra a donde fui a celebrar con mi esposa nuestros 24 años de casados,
hace algunos ayeres. Te abrazo desde México emocionadamente:
J u l i o .

 

me encanto, pude sentir la melancolia, con una combinacion extraña de alegria en cada verso... gracias por compartirlo.

 

Buen poema, con algunos versos, como los que he subrayado, que derrochan gran belleza.
Saludos, Julio.

 

Elisalle, estimada amiga:

Hasta hoy descubro tu amable comentario y te pido mil perdones
por la tardanza en contestar. El cúmulo de trabajo me hizo postergar
mis deberes de caballero. Te abrazo desde mi tropical rincón del
sureste mexicano:

J u l i o .