Lo Que No Hubiese Querido Escribir

LO QUE NO HUBIESE QUERIDO ESCRIBIR.

Domingo, noche, lluvia y desencanto,
y la alegría es sólo una tierra prometida.
Soy una gata en celo con deseos de morder
uno y cada uno de todos tus recuerdos.

El olvido tiende a veces su eficaz trampa
de probar si realmente me he olvidado de ti.
Una gangrena sin frenos que corre veloz
en dirección exacta hacia el corazón.

Mi ángel de la guarda se guarda bien,
con sus alas rotas y sangre en los labios.
Un whisky en la mano y una faso a medias
para borrar toda imagen de dios padre.

La brisa de tormenta arrastra preguntas
con signos de interrogación como dagas.
Media verdad que es igual a una mentira,
una mentira y el don de convertirla en verdad.

Juegos de idiotas que sé jugar muy bien,
deseos de ser de alguien que no lastime.
Un nombre que poder decir al querer dormir,
un motivo para amanecer un día más.

Domingo, noche, nubes y una canción,
esto es lo que no hubiese querido escribir.
Y el diablo es un compañero de emociones,
cuando bajo las escaleras de mi propio infierno.

 

Buenos versos, poeta. Me gustó ese reniego a asumir que muchas veces estamos cerca del propio infierno de los recuerdos, que por otro lado es la primer forma de alejarnos de él...

Mis estrellas y aplausos. Saludos, Big

 

Muy bonitos tus versos, me encanta esa parte que es bohemia... domingo, noche, lluvia, bueno, un sinfin de metáforas que hacen de tu poema, un escrito interesante y profundo, aunque lleva cierta delicadeza en cada renglón.

Te felicito por esta preciosa obra.

Un beso grande.

 

Recordar es la forma de no olvidar. Bello poema.

Saludos y mis estrellas
Adriana Patricia

 

Gracias amigo por tus palabras.
Un abrazo
Jorge

 

Bellos y tristes versos. Su lectura me ha resultado altamente agradable y es por ello que te felicito y aplaudo en pie. Un abrazo.

 

Gracias Roxy por pasar por aquí y dejar tu huella.
Un beso grande
Jor

 

Gracias por tus palabras amiga. Wauu, qué honor todo eso que honor todo eso que me dices. Te agradezco una vez más.
Un beso enorme
Jorge