Carta al Engaño

Te pensé….

Deseé enviarte un mensaje
decirte que no dejo de pensarte,
morí de ganas por llamarte
pero preferí tratar de olvidarte.

Fracasé….

Al intentar no amarte
Cuando con palabras frías
mataste mi paz en un instante
diciendo, por mi bien debo marcharme.

Perdí….

Todo sentido de la vida
sumido en melancolía,
no sabía decir al mundo
como tus palabras me herían.

Nací…

Como quien vuelve a la vida,
tratando de entender sin remedio
que del dolor se suple
un ser que siente

Aprendí…

Que amar es dulce y amargo
fuerte alegría y desengaño,
que no se puede vivir sin el
pues aún te sigo amando.

Aún así….

Te digo sin mentir,
no has hecho daño
pese a todo soy feliz
sin importar el engaño
del cual me hiciste objeto
por un poco más de un año.

Sibelius.

 

que hermosas letras, un placer leerte

saludos

 

Hermosamente plasmado el recorrido en el amor y que muchas veces tiene de protagonista al engaño...

El cierre te quedó soverbio y a la vez, exquisitamente aleccionador....

Un gusto recorrerlo..

Mis saludos y tus merecidas estrellas...

Camelia

 

gracias amigos por sus comentarios
me alegra que les haya gustado

 

Me gustó como
a partir de una idea
nacía la estrofa,
ignoro como se llame el
recurso poético
pero lo investigaré, en esencia la melancolía
invade, que esta
minada por un romance
perenne, y amigo el final
es para dejar frio un abrazo
Silbelius un gusto pasar amigo

 

sabes como se llama el recurso poético.

ocurrencia! jajajaja, si ubicas el nombre me dices amigo del alma.
es gratificante saber que te ha gustado mi escrito

 

Ahh..! que bello, sabes me encanta tu forma de escribir. Muchas veces es mejor que decir palabras.....besitos

 

Tristes letras, pero bellas. Detrás de ellas late un gran sentimiento. Me gustó la arquitectura del poema, así como las rimas. En verdad, amar es dulce y amar-go.
Saludos y estrellas, Sibelius.

 

gracias por el comentario amigo mío, es un honor viniendo de tu parte; mis escritos son solo eso, palabras que describen sentimientos y momentos de mi vida y de aquellos que me hablan de sus vidas